Médicos de un centro de salud de Colotlán, México, descubrieron que una nena de 12 años, de origen Wixárika, habría sido abusada sexualmente por su progenitor luego de que la asistieran por la picadura de un alacrán. Producto de la violencia, la joven quedó embarazada. Si bien el hecho ocurrió meses atrás, el caso volvió a cobrar trascendencia a raíz de la detención del presunto agresor esta semana.
La menor, oriunda de Santa Catarina Cuexcomatitlán, localidad ubicada en el municipio Mezquitic, en Jalisco, fue trasladada a un hospital en Colotlán a causa de una picadura de alacrán. En esa visita médica -que tuvo lugar en febrero de este año- los galenos advirtieron señales de violencia.
Según precisó la Fiscalía del Estado en un informe, “durante su revisión, los médicos detectaron que la niña de 12 años de edad presentaba diagnóstico de violencia familiar sexual con embarazo confirmado, además de estrés postraumático”. En consecuencia, las autoridades pertinentes abrieron una investigación que llevó a la detención de un hombre identificado como José Luis C., su progenitor.
La Fiscalía Especial Regional llevó a cabo la detención del presunto agresor el pasado martes. Así lo informó el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, quien agregó que el hombre “ya fue puesto a disposición del Juez de Control que le dará seguimiento a su situación jurídica para que, una vez que se emita una sentencia, reciba todo el peso de la ley”.
En lo que respecta a la menor, ella decidió someterse a la Interrupción Legal del Embarazo y, el pasado 12 de abril, fue ingresada al centro de Maternidad Esperanza López Mateo, en Guadalajara. Sin embargo, diferentes organizaciones denunciaron que, al cabo de 11 días internada, aún no le habían realizado el procedimiento.
Asimismo, Patricia Ortega Medellín, representante de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos (Ddeser), organización que acompaña a la joven, informó que un empleado del hospital intentó persuadir a la víctima de ejercer su derecho al aborto.
“Hay un momento en que se presenta un médico del mismo hospital para decirle que si quiere puede hacerle un eco para que escuche el corazón del producto (...) lo que nosotros empezamos a ver es que la intención era que ella desistiera del procedimiento”, aseguró.
En consecuencia, la menor fue trasladada a un nosocomio en la Ciudad de México, donde el 24 de abril pudo acceder al procedimiento. Desde Ddeser anticiparon que, en adelante, la joven contará con atención psicológica y acompañamiento de la Secretaría de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres.