Un niño de tres años murió luego de que su madre presuntamente le negara comida por tres días durante la pandemia del Covid-19. La mujer, descrita por un testigo como “profundamente religiosa”, habría forzado al niño a realizar un ayuno que culminó en desnutrición y deshidratación.
El caso de Olabisi y Taiwo Abubakar conmocionó a la capital galesa de Cardiff. La mujer, de procedencia nigeriana, llegó a la isla británica solicitando asilo. Para el inicio del confinamiento obligatorio, la Olabisi ya residía en Cwmdare Street en Cathays junto al pequeño de 3 años.
De acuerdo con medios locales, el 29 de junio de 2020 un amigo de Abubakar alertó a las autoridades de su preocupación por el bienestar de Taiwo. El hombre, identificado como Mark Heywood KC, habría notado el estado de desnutrición que presentaba el menor.
Lamentablemente, cuando los efectivos policiales arribaron se encontraron con el cuerpo sin vida y desnutrido del pequeño. “Estaba severamente demacrado y frío al tacto. Era claro que había estado muerto por algún tiempo”, detalló Heywood.
“La Sra. Abubakar es una cristiana pentecostal profundamente religiosa, para quien el ayuno es un principio de su fe. Su religión deja claro que el ayuno es un acto de devoción, y los niños, demasiado pequeños para entender esto, no deben ayunar”, agregó el testigo.
Tras ser trasladada a un centro asistencial por presentar un grado similar de desnutrición, la mujer -principal sospechosa de la muerte de Taiwo- fue detenida por los uniformados de Cardiff. “El caso de la acusación es que la Sra. Abubakar consciente y deliberadamente descuidó al menor al no proporcionarle comida ni agua, lo que provocó que se uniera a ella en el ayuno como un acto religioso”, concluyó el hombre,
Luego de realizar la autopsia, los profesionales informaron al medio británico Sky que el niño pesaba 9,8 kg al momento del deceso. “No hay evidencia que sugiera que su muerte fue causada por algo más que desnutrición y deshidratación”, reportó el diario.
El pasado martes 18 comenzó el juicio contra la mujer de 42 años que habría matado de hambre a su hijo de 3 años. El caso se encuentra a cargo del Tribunal de la Corona de Cardiff y Olabisi enfrenta cargos por crueldad infantil y homicidio involuntario.
