La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, anunció el despliegue de ayuda de inteligencia militar para Ucrania, contra la “invasión no provocada e ilegal” por parte de Rusia.
“Enviaremos a nueve miembros de las Fuerzas de Defensa de Nueva Zelanda a Reino Unido y Bélgica para apoyar a nuestros socios en trabajos de inteligencia y coordinación en los próximos tres meses”, precisó la mandataria neozelandesa en un comunicado, donde también informó de que compartirán la información de inteligencia no clasificada durante el mismo periodo con sus socios europeos.
En el Reino Unido, siete efectivos apoyarán “el trabajo de inteligencia en la guerra de Ucrania” y otras partes del mundo, y uno trabajará dentro del Cuartel General Conjunto Permanente. Mientras, en Bélgica, una persona se unirá a la oficina del Agregado de Defensa neozelandés ante la OTAN, indicó Ardern.
La semana pasada, el Gobierno neozelandés anunció el envío de ayuda militar no letal a Ucrania, que supuso la primera iniciativa de este tipo por parte del país oceánico, que se suma a la asistencia humanitaria y un programa de acogida temporal para los familiares de los ucranianos que viven en el país oceánico.
Además, el Ejecutivo de Wellington ha aplicado sanciones contra 460 personas y entidades de Rusia, incluyendo al presidente ruso, Vladimir Putin, tras entrar en vigor este mes una nueva ley que permite al país imponer sanciones selectivas.
“Sabemos que las sanciones a nivel mundial han dificultado que el régimen ruso financie su guerra. El valor del rublo ha colapsado y Rusia está dejando de estar entre las 20 principales economías del mundo. Y Nueva Zelanda está desempeñando su papel en esto”, dijo Ardern.