La Diócesis de Osma-Soria ordenó el cierre inmediato de la histórica y emblemática ermita del Mirón (siglos XIII-XVIII), en la capital soriana de España. La decisión se dio tras la polémica suscitada por la desafortunada restauración de varios motivos ornamentales, como los angelotes (figuras escultóricas de ángeles) del Barroco situados en la nave central.
La autoridad eclesiástica ya admitió esta desafortunada intervención conocida en los últimos días a raíz de una denuncia vertida en la red social X por el Colectivo Soria Patrimonio, lo que motivó una investigación anunciada por el alcalde, Carlos Martínez.
La polémica se centra en el repintado de una serie de angelotes barrocos alineados en la parte superior de las dos paredes que jalonan la nave central de esta ermita originaria del siglo XIII, época de la que únicamente se conserva el ábside, ya que el resto fue demolido y reconstruido en 1725.
El restaurador no solo coloreó la abundante cabellera de los angelotes, sino que también pigmentó las cejas, resaltó los ojos y retocó de un rojo intenso los labios de todas y cada una de las figuras moldeadas en yeso de color blanco.
Expediente sancionador
El resultado del “profesional”, por su tosquedad y falta de destreza artística, derivó en la reciente investigación de los hechos que a estas horas tienen repercusión nacional e internacional.
Serán los “criterios de los técnicos” los que resuelvan este expediente, como todos los demás, detalló el alcalde Martínez antes de afirmar que existen muchas posibilidades de que acabe siendo un “expediente sancionador”. Por esta razón, el alcalde pidió al Obispado la revisión de la actuación con la intención de “reconducir y restaurar la situación original del templo”.
¿Otro Ecce Homo?
Este mes se cumplen 12 años del primer meme viral a nivel mundial protagonizado por la obra del “Ecce Homo”. Se trató de una “particular restauración” de una obra centenaria, que revolucionó al arte, y llevó a ubicar en el mapa a un pequeño pueblo español.
Todo comenzó cuando Cecilia Giménez, de 91 años, oriunda del municipio de Borja, en España, se ofreciera de forma totalmente voluntaria para restaurar el Ecce Homo, obra perteneciente a la iglesia del Santuario de Misericordia. Se trata de un óleo sobre yeso de 66 × 40 cm, pintado por Elías García Martínez después de la Guerra Civil. El paso del tiempo lo había ido deteriorando porque el pintor no utilizó los materiales propios para pintar sobre yeso.
Como resultado, Cecilia hizo que el Ecce Homo se convirtiera en un fenómeno viral a nivel mundial y ubicó al pequeño municipio zaragozano (de apenas 5.000 habitantes) en el mapa.
La pintura era un óleo sobre yeso de 66 × 40 cm, obra del artista Elías García Martínez, un catedrático de la Escuela de Arte de Zaragoza, quien pasaba sus vacaciones en Borja. En 1930 realizó esta pintura al óleo, inspirado en el Ecce Homo de Guido Reni.
La obra se consideraba de poco valor, pero más de 80 años después se planteó su restauración a una aficionada a la pintura, la mencionada Cecilia Giménez.
El resultado fue noticia primero en el principal periódico aragonés, y posteriormente tomó relevancia nacional, llegando a medios de Madrid y Barcelona. Y de allí, al mundo.