Un atacante suicida se inmoló durante la oración comunitaria del viernes en una mezquita chiita en la ciudad de Peshawar, al noroeste de Pakistán, lo que provocó la muerte de al menos 56 personas y heridas a cerca de 200, informaron las autoridades locales.
El atacante suicida logró entrar por la fuerza hasta la sala principal del lugar de culto en donde finalmente hizo detonar los explosivos que traía consigo. En una declaración a los medios, Mohammad Asim, portavoz del Hospital Lady Reading, a donde fueron trasladadas las víctimas de la explosión, confirmó que 30 cuerpos fueron transportados al centro de salud sin vida.
Agregó que más de 50 personas están recibiendo atención médica en el hospital debido a las heridas, y que más de 10 de ellos están en estado crítico. Según testigos presenciales, el atacante suicida vestía un atuendo negro tradicional, y cuando se acercó a la puerta principal de la mezquita, comenzó a disparar, lo que causó la muerte de un guardia de seguridad en el acto y lesiones a otros dos.
Hasta el momento nadie se ha atribuido la responsabilidad del ataque. Sin embargo, en el pasado, Tehrik-e-Taliban Pakistán, un conglomerado de grupos terroristas, se atribuyó la responsabilidad de ataques similares.