El PIB de Perú se desplomó 17,37% en el primer semestre debido al impacto de una cuarentena nacional de más de 100 días por la pandemia del coronavirus, informó este sábado el gobierno, con lo que la economía peruana entra en recesión.
El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) dijo en un informe que “en el periodo enero-junio del presente año, la producción nacional disminuyó en 17,37%”.
Destacó que la cifra de junio (-18,06%) fue mejor que la de abril (-40,49%) y mayo (-32,75%) gracias a “la reanudación de operaciones de cerca de 56 actividades económicas” a inicios de julio, después de la etapa más rígida de la cuarentena.
Pero la reapertura económica no impidió el descenso y las cifras divulgadas por el INEI reflejan que Perú entró en recesión, tal como ha ocurrido por efecto de la pandemia en Estados Unidos y otros países de la región y Europa tras acumular dos trimestres con números rojos en el PIB.
Aunque el INEI no divulgó todavía la cifra del PIB del segundo trimestre (lo hará dentro de los próximos días), algunos economistas estiman una caída en torno al 32%. En el primer trimestre la baja fue de 3,4%, por efecto de la caída de 16,26% en marzo, cuando comenzó la cuarentena.
”Desde que comenzó a reabrirse la economía la producción comenzó a crecer de a poquito. Pero esos crecimientos no alcanzan para poner en azul el crecimiento (...), en el segundo trimestre estaría cayendo 32%”, dijo a la AFP el economista Jorge González Izquierdo.
”Este año vamos a estar en una profunda recesión obviamente, con un agravante por el repunte de la pandemia que se está experimentando en agosto”, agregó el también exministro de Trabajo. En junio cayeron casi todos los sectores productivos y de servicios, dijo el INEI. Una excepción fue la pesca, que avanzó 48,05%, “por la mayor captura de especies”, agregó.
El Banco Central pronostica una caída de 12,5% del PIB para 2020, la peor cifra en tres décadas, desde el 13,4% de 1989, el último año del primer gobierno de Alan García, un periodo marcado por la crisis económica y la hiperinflación, además de la violencia guerrillera.
Antes de la pandemia, Perú crecía por sobre el promedio de América Latina. El Producto Interno Bruto había avanzado 2,16% en 2019 y 4% en 2018.Pero la tendencia cambió drásticamente con el coronavirus: las exportaciones cayeron 27% en el primer semestre, en relación al mismo lapso de 2019, para totalizar 16.233 millones de dólares, dijo el viernes el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo.Perú registra 25.856 muertos por coronavirus y más de medio millón de casos confirmados.
Para contener al coronavirus rigió desde el 16 de marzo al 30 de junio una cuarentena nacional obligatoria que semiparalizó la economía y dejó sin empleo a 2,6 millones de peruanos, según cifras oficiales.
Para paliar la complicada situación económica de las familias peruanas, el Congreso autorizó de forma excepcional el retiro de dinero de los fondos de pensiones privados, lo que hicieron 3,1 millones de afiliados, que sacaron un total de 5.500 millones de dólares.
”La situación es muy difícil, la recesión que estamos viviendo es muy profunda, con secuelas de pérdidas y de empleos perdidos”, expresó González Izquierdo.Antes del coronavirus,
Perú proyectaba para 2020 un crecimiento de 4,0% y había comenzado el año con cifras auspiciosas del PIB: 2,98% en enero y 3,83% en febrero.Pero tras la irrupción de la pandemia el PIB tuvo números rojos cuatro meses seguidos: -16,26% en marzo, -40,49% en abril, -32,75% en mayo y -18,06% en junio.
Para levantar la economía, las autoridades permitieron un desconfinamiento desde el 1 de julio, pero ante un rebrote de la pandemia el gobierno restableció esta semana el toque de queda dominical y prohibió las reuniones sociales familiares, que habían pasado a ser el mayor foco de contagio. Antes eran los mercados y bancos.
El gobierno también amplió a más provincias el cofinamiento, que ahora afecta a 11 millones de peruanos, un tercio de la población.
El país andino es tercero en decesos por coronavirus en América Latina, detrás de Brasil y México, y segundo en casos, después del gigante sudamericano.
Pero es proporcionalmente el de mayor cantidad de muertes en relación a la población de 32,9 millones, con 784 cada millón de habitantes.