Una escultura del rey emérito Juan Carlos I con una escopeta en sus manos ha generado polémica en España. Se trata de una intervención que apareció en la céntrica Puerta del Sol.
El problema es que el rey emérito apunta con su arma al monumento del Oso y el Madroño. Este “gesto” ha generado preguntas en los transeúntes que pasaban por la zona. Se trata de una obra del artista chileno Nicolás Miranda que este miércoles apareció en el corazón de la capital española.
El artista, que suele utilizar el humor y la ironía en sus trabajos, recuerda que el rey emérito ha sido criticado en España “por su lujuriosa vida privada y por su afición a la caza de animales en peligro de extinción como bisontes, elefantes y osos”.
Según informó El Diario, la obra “busca generar una intervención paradójica con la figura del emérito desde las artes visuales mediante códigos de lectura colectivos y masivos”.
Aunque tiene una apariencia metálica está elaborada de poliuretano y masa de modelar. Llegó desde Santiago de Chile y fue colocada el martes en la céntrica plaza de Madrid. Dicha obra va a participar de una exposición del artista en el centro cultural La Parcería, en Arganzuela.
“Ante todo cuestiono la visualidad, como sistema combinatorio. Mi operación como artista contemporáneo es parasitaria. Parasito algo que ya existe. Por ejemplo, el monumento madrileño lo conecto con la monarquía española para hacer una parodia al símbolo de la ciudad. Pero al final todo tiene que ver con el lenguaje visual”, explicó Nicolás Miranda.