Rusia mató este viernes con un misil al menos a 50 personas en la estación de tren de Krematorsk, en el este de Ucrania, donde los civiles esperaban para ser evacuados. La imagen del arma utilizada por las tropas de Vladimir Putin impactó por un cínico mensaje: “Por nuestros niños”.
Agencias internacionales de prensa compartieron fotos del misil destruido tras el ataque fatal. En los restos retorcidos se puede leer, con letras blancas y en ruso, la inscripción “por nuestros niños”.
La frase, que suena a venganza, es usada a veces por los separatistas prorrusos para referirse a sus hijos muertos en la guerra del Donbás, que comenzó en 2014.
“Este es un golpe deliberado a la infraestructura de pasajeros del ferrocarril y los residentes de Kramatorsk”, localidad situada al norte de la región ucraniana de Donetsk, comunicaron los ferrocarriles ucranianos en Facebook.
El jefe de la administración militar regional de Donetsk, Pavlo Kirilenko, dijo que “miles de personas se encontraban en la estación en el momento del ataque con misiles, mientras los residentes de Donetsk eran evacuados a las regiones más seguras de Ucrania”.
Justamente, Kramatorsk es la principal base militar del Ejército ucraniano en la región.
Por su lado, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, calificó el acto de “maldad sin límites” por parte de Rusia e informó que 300 personas resultaron heridas, además de los 50 fallecidos ya notificados.
El balance podría ser mayor, en lo que ya constituye el ataque más letal desde que comenzó el conflicto, hace seis semanas.
Por su parte, Rusia negó su responsabilidad en la tragedia y denunció una “provocación” de Kiev.