Videos en las redes sociales reflejaron los segundos previos al terremoto de magnitud 7,8 que arrasó con el este de Turquía y la vecina Siria. Más allá de los movimientos edilicios, se observaron luces en el cielo, algo que se ha visto en otros sismos importantes como el sucedido en México en septiembre de 2021.
Qué fueron las luces en el cielo de Turquía y Siria segundos antes del terremoto
La madrugada del lunes tuvo a intensos destellos en el cielo de Turquía y Siria por algunos segundos, con apariencia similar a las auroras boreales. Se trata de las llamadas coloquialmente “luces de terremoto”, que se pueden apreciar en las inmediaciones del lugar donde se registra una actividad tectónica, aunque aparecen en menos del 0,5% de los movimientos sísmicos.
Según el Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el fenómeno lumínico se produce por el choque de las capas tectónicas, las cuales generan una carga eléctrica. Es conocido como triboluminiscencia.
Básicamente, las ondas electromagnéticas ionizan el aire, al llegar a las nubes chocan con las cargas eléctricas y producen los destellos.
Rocas de la corteza terrestre como el basalto y el gabro tienen pequeñas imperfecciones en sus cristales. Cuando una onda sísmica golpea la fricción libera cargas eléctricas de estas rocas. Las cargas se juntan y salen disparadas a la superficie a gran velocidad, manifestándose en el aire en forma de descargas eléctricas y luz.
“Las cargas pueden combinarse y formar una especie de estado similar al plasma, que puede viajar a velocidades muy altas y estallar en la superficie para producir descargas eléctricas en el aire”, explicó el cristalógrafo Friedemann Freund, científico de la NASA, a la revista National Geographic.
De todos modos, esas luces también pueden confundirse con fallos en generadores, transformadores y, en general, en el tendido eléctrico, que son los que más originan los chispazos luminosos.
El terremoto podría afectar a más de 23 millones de personas
El potente terremoto que mató a miles de personas en el sudeste de Turquía y el norte de Siria podría afectar a 23 millones de personas en esas regiones, advirtió este martes la Organización Mundial de la Salud (OMS).
”Los mapas muestran que 23 millones de personas están expuestas, incluyendo cinco millones de personas vulnerables”, afirmó una responsable de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Adelheid Marschang, ante el consejo ejecutivo de esta agencia de la ONU.
”La OMS conoce la fuerte capacidad de respuesta de Turquía y considera que las principales necesidades sin satisfacer podrían situarse en Siria, en lo inmediato y a medio plazo”, añadió.
El sismo, seguido de potentes réplicas, ha causado más de 5.000 muertos en Turquía y Siria, según los últimos balances provisionales. Miles de heridos y de personas que se han quedado sin casa resisten en plena ola de frío glacial.
”El envío de ayuda por la frontera hacia el nordeste de Siria podría estar o ya estar maltrecho debido a los daños causados por el terremoto. Eso ya es en sí una enorme crisis”, insistió Marschang.
El secretario general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió por su parte de la urgencia de la situación.
”Ahora es una carrera contrarreloj. Cada minuto que pasa, cada hora que pasa, las posibilidades de encontrar supervivientes disminuyen”, insistió, precisando que enviarán “tres vuelos chárter a los dos países” con material médico, incluidos lotes quirúrgicos, desde la plataforma de logística humanitaria de Dubái.