El presidente de Rusia, Vladímir Putin, aseguró que la campaña militar rusa en Ucrania marcha exitosamente, destacó el heroísmo de los soldados rusos y denunció que los combatientes ucranianos han utilizado a extranjeros como rehenes. “La operación especial militar avanza en estricta correspondencia con el cronograma, según los planes. Todas las misiones planteadas se cumplen exitosamente”, afirmó en una reunión del Consejo de Seguridad ruso, según las imágenes difundidas en televisión.
Putin –que llama “operación especial militar” a la invasión de Ucrania– puso ejemplos del coraje de algunos militares rusos, que contrapuso a las fuerzas ucranianas, a las que acusó de impedir a los civiles utilizar los corredores humanitarios habilitados por el Ejército ruso. Acuso a los militares ucranianos de tomar a ciudadanos extranjeros “en calidad de rehenes, entre ellos miles de jóvenes estudiantes que estudiaban en Ucrania”, añadió.
Según Putin, los militares rusos “habilitaron corredores en todas la zonas de enfrentamientos sin excepción, para que los civiles y los extranjeros tengan la posibilidad de ir a un lugar seguro”, indicó, al tiempo que denunció que los ucranianos “no permiten” a los civiles utilizar estos corredores. Putin, que apareció con traje y corbata negros, aseguró que el Gobierno compensará a las familias de los militares rusos caídos en combate con 7 millones de rublos (62.668 dólares), a lo que se sumará un pago adicional de 5 millones de rublos (77.722 dólares). “Además se le pagará una compensación mensual a todos los miembros de la familia”, indicó. Según el presidente, todos los militares que resulten heridos durante la campaña recibirán un seguro médico y una compensación.
Asimismo, en una conversación telefónica que mantuvo con Emmanuel Macron, presidente de Francia, Putin le aseguró que su ofensiva sobre Ucrania va “según lo previsto” y se va a recrudecer a menos que ese país acepte sus condiciones, entre ellas su desmilitarización.
La conversación telefónica tuvo lugar a petición de Putin y en ella el líder ruso advirtió de que si los ucranianos no aceptan sus términos por la vía político-diplomática, Rusia los conseguirá por la militar. Macron, según las fuentes, le dijo que estaba cometiendo “un error grave”, que estaba buscando “pretextos” y que su actuación no era conforme a la realidad ni podía justificar su violencia ni el precio que va a pagar su país, que acabará “aislado, debilitado y bajo sanciones” durante largo tiempo.
El jefe de Estado francés extrajo de la conversación que “lo peor está por llegar”, dada la determinación de Putin y su argumento de achacar a Ucrania la culpa por el incumplimiento, a su juicio, de los acuerdos de paz de Minsk. Desde el Elíseo se admitió que aunque la charla fue “tensa” sobre el fondo, el diálogo fue franco y hay intención de mantener el contacto porque ambos dirigentes “pueden decirse cosas fuertes sin romper la conversación”.
Macron exigió de nuevo a Putin que ponga fin a la ofensiva militar y le pidió que garantice la integridad física tanto del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, como de sus allegados y los civiles en el país.