El presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó este martes 25 de abril un decreto en represalia por la retención de activos rusos en el extranjero, en virtud del cual el capital de la empresa alemana Uniper y la finlandesa Fortum se pusieron temporalmente bajo la administración externa de la Agencia Federal para la Gestión de la Propiedad Estatal.
Según el decreto publicado en el portal del Gobierno, la medida se toma “en relación con la necesidad de tomar medidas urgentes en respuesta a las acciones de derecho internacional hostiles y contradictorias por parte de Estados Unidos y Estados extranjeros y organizaciones internacionales que se unieron a él (EE.UU.), con el objetivo de privar ilegalmente a la Federación Rusa, a las personas físicas y jurídicas rusas de sus derechos de propiedad y (o) restringir sus derechos de propiedad”.
En virtud del decreto, en caso de privación o restricción de los derechos de propiedad rusa en el extranjero, se introduce la gestión externa de los activos asociados con países “enemigos” y ubicados en el territorio de Rusia. Los bienes muebles e inmuebles, valores y participaciones en el capital, así como los derechos de propiedad, pueden estar bajo la gestión temporal de la Agencia Federal para la Gestión de la Propiedad Estatal en caso de acciones similares en relación con la propiedad rusa en el extranjero.
El año pasado, el Gobierno alemán tomó empresas locales, sucursales de los gigantes energéticos rusos Gazprom y Rosneft, bajo control externo. Polonia le siguió al implementar la gestión externa de las empresas Gazprom y Novatek. Además, se congelaron más de USD 300 mil millones de activos financieros rusos en los bancos de EE.UU. y la UE, y las autoridades amenazaron a Moscú con transferirlos a Ucrania por la guerra.
