La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) vigila a un asteroide de 200 metros de diámetro potencialmente peligroso que pasará “cerca” de la Tierra a fines de mayo.
Expertos en el campo expresaron su preocupación, señalando que nuestro planeta no está preparado adecuadamente para defenderse de eventos de este tipo, lo que generó un efecto viral en las redes sociales con la noticia.
¿Cuándo se espera que el asteroide pase cerca de la Tierra?
El asteroide, llamado por la NASA como 2023 CL3, fue incluido en la lista de objetos espaciales que requieren ser estudiados debido a su proximidad a la Tierra. Se espera que pase cerca de nuestro planeta el 24 de mayo.
Lo hará a una distancia de 7,2 millones de kilómetros, moviéndose a una velocidad considerable. Para tener una noción, la Luna, nuestro satélite natural, está a 384.400 kilómetros de distancia de la Tierra, así que el asteroide está lejos está de representar un peligro de impacto.
Los análisis realizados por la agencia espacial revelan que el tamaño del asteroide es más del doble de la altura de la Estatua de la Libertad de Nueva York, que cuenta con 93 metros de altura si se considera su base.
Este dato llevó a algunos especialistas a considerar que el asteroide es “potencialmente peligroso”, ya que una roca espacial de esa magnitud podría causar graves daños si colisionara con la Tierra.
Tiempo atrás, el CEO de SpaceX, Elon Musk, había manifestado su preocupación a través de Twitter, afirmando que “una gran roca eventualmente golpeará la Tierra y actualmente no tenemos defensa”. Estas palabras resaltan la urgente necesidad de desarrollar medidas de protección planetaria.
La NASA ha estado investigando métodos de defensa ante asteroides durante algún tiempo. El año pasado, por ejemplo, lanzó una misión de prueba con el objetivo de alterar la órbita de un asteroide conocido como Dimorphos. Estos esfuerzos buscan encontrar soluciones viables para desviar o destruir asteroides que representen una amenaza potencial para la Tierra.
La mayoría de los asteroides se desintegran al entrar en la atmósfera terrestre, aunque los que son suficientemente grandes podrían causar daños significativos, por ello se sigue su estudio y análisis.