Como ha ocurrido en otras guerras, el factor climático podría complicar las operaciones del ejército ruso. Pese a su poderío militar, las tropas de Vladimir Putin han avanzado muy lentamente sobre el territorio de Ucrania.
Ahora, con la llegada de la primavera boreal otro factor podría complicar los planes de Rusia. La “raspútitsa” es un fenómeno estacional que convierte la tierra firme en un lodo poco favorable al avance de vehículos militares.
Cabe destacar que la palabra significa “tiempo de las malas rutas”. Es un fenómeno bien conocido en Ucrania, Rusia y Bielorrusia. En esta época, el aumento de la temperatura y derretimiento de la nieve y las fuertes lluvias en otoño se combinan para convertirse en una pesadilla lodoza.
“Ya ha habido muchas situaciones en las que tanques rusos y otros vehículos pasaron por campos y quedaron bloqueados. Los soldados se vieron obligados a abandonarlos y continuar a pie”, afirmó a la AFP el analista militar ucraniano Mikola Beleskov.
Este fenómeno ocurre en las famosas “tierras negras” de Ucrania, un tipo de suelo conocido como “chernozem”. La raspútitsa es uno de los mayores enemigos de los ejércitos. De hecho, las tropas de Napoleón la sufrieron durante su retirada de Rusia a finales de 1812 y las dejó expuestas al rigor del invierno.
En la Segunda Guerra Mundial desempeñó un papel crucial cuando la Blitzkrieg fue casi detenida por el lodo, haciendo que los tanques más poderosos quedaran prácticamente inutilizables.