El líder conservador y primer ministro de Reino Unido anunció el domingo que, si gana los comicios del 4 de julio, impondrá un Servicio Nacional obligatorio a los jóvenes de 18 años, que podrán elegir entre estar doce meses en las Fuerzas Armadas o hacer un voluntariado 25 días al año en servicios públicos como los bomberos, la Policía o el servicio nacional de salud (NHS).
Rishi Sunak dijo que el plan sería financiado con dinero recaudado de combatir la evasión fiscal y del Fondo de Prosperidad Compartida del Reino Unido (UKSPF) -introducido tras el Brexit para compensar la pérdida de ayudas de la Unión Europea-, hasta un total anual de 2.500 millones de libras (2.930 millones de euros).
Numerosos políticos de la oposición, así como expertos militares, han señalado que ese capital no será suficiente, pues habrá que asegurarse de que todas esas instituciones tengan personal para formar a los jóvenes. En el caso de las Fuerzas Armadas se calcula que, además, los seleccionados no podrían superar los 30.000, y existen interrogantes también sobre qué sucedería con quienes se negaran a hacer el servicio obligatorio.
En respuesta, el líder del Partido Laborista británico, Keir Starmer, tildó este lunes de “desesperado” el plan anunciado por su rival conservador, Rishi Sunak, de imponer un Servicio Nacional militar o de voluntariado si gana las elecciones.
Starmer bromeó que la propuesta daría lugar a una “Guardia Nacional de adolescentes”, en alusión a la milicia ciudadana que existía en el Reino Unido para apoyar a las tropas regulares durante la segunda Guerra Mundial.
El político, que lidera las encuestas electorales, recordó que bajo los sucesivos Gobiernos conservadores, en el poder desde 2010, las Fuerzas Armadas han sido diezmadas hasta quedar con su tamaño más pequeño desde “la época de Napoleón”, y prometió que si gobierna él priorizará la seguridad nacional.