Rusia cerró su espacio aéreo a las compañías aéreas británicas, incluidos los vuelos de tránsito, anunciaron las autoridades rusas este viernes 25 de febrero. La medida se produce en respuesta a la prohibición del Reino Unido de vuelos rusos en su espacio aéreo y la negativa de Londres en mantener negociaciones con Moscú para resolver las diferencias.
Rosaviation, la Agencia Federal de Transporte Aéreo de Rusia, señaló en un comunicado que había buscado consultas con las autoridades británicas sobre las restricciones impuestas el jueves a los vuelos rusos en el espacio aéreo del Reino Unido, como parte de las sanciones después de que Rusia lanzó su intervención militar en Ucrania, pero la petición fue rechazada.
La prohibición de vuelos británicos se aplica a “vuelos de aeronaves de propiedad, arrendadas u operadas por una persona asociada con el Reino Unido o registrada en el Reino Unido a puntos en el territorio de la Federación Rusa, incluidos los vuelos de tránsito a través del espacio aéreo de la Federación, y entró en vigor a las 11 A. m. hora de Moscú (0800 GMT) del viernes”, señaló Rosaviation.
El jueves, Reino Unido notificó a Rusia sobre las restricciones a los vuelos de las aerolíneas rusas en el espacio aéreo británico, como parte de un paquete de nuevas sanciones. Rosaviation criticó la decisión y señaló que esta viola un acuerdo entre Rusia y Reino Unido que prevé la cooperación “en todos los temas necesarios para garantizar la operación segura y eficiente de las rutas contractuales” y realiza consultas “en caso de dificultades en la operación de estas rutas”.
El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que la operación tiene como objetivo proteger a las personas “sometidas al genocidio” por parte de Kiev y “desmilitarizar y desnazificar” Ucrania, al tiempo que pidió al Ejército ucraniano que deponga las armas. La ofensiva ha sido recibida por la condena internacional y anuncios de nuevas sanciones por parte de los países occidentales contra Moscú.