Aunque no hay pruebas concluyentes, la desaparición de Madeleine McCann tiene como figura central de la siniestra historia a un convicto alemán acusado y condenado por pedofilia.
Se trata de Christian Brueckner, un hombre de 43 años que está en prisión en su país por la desaparición de Inga Gehricke , una niña de 5 años oriunda de en Neuwegersleben, en el norte de Alemania.
Recientemente Serafim Vieira, un exabogado de Brueckner que lo defendió en una causa por robo de combustible a vehículos en Portugal, habló a la prensa e hizo perturbadoras afirmaciones sobre su excliente.
Ante la consulta de los periodistas sobre el posible vínculo entre la nena británica y el alemán, el letrado afirmó: “Creo que puede estar detrás de la desaparición de Madeleine”.
A su vez afirmó que no se siente sorprendido por las versiones y la línea de investigación que busca comprobar la responsabilidad del pedófilo teutón
en la desaparición de Maddie.
Cuando se le preguntaron si su antiguo cliente tenía un temperamento psicópata, dijo sobre Brueckner: “No puedo decir que no. Todo lo contrario”.
Según el portal Mirror, las autoridades en Alemania sorprendieron al mundo hace quince días al anunciar que investigaban a Brueckner por la desaparición de Madeleine McCann hace 13 años, durante sus vacaciones con sus padres en Praia da Luz, en Portugal.
La policía también está investigando si Brueckner está relacionado con los casos de cinco niños que se remontan a 1996 en Alemania, Bélgica y Portugal.