Más de 1.700 personas que sirvieron en el Congreso de los Estados Unidos tuvieron seres humanos como propiedad privada durante su vida, según determinó una investigación publicada este lunes 10 de enero. En total se encontraron 1.715 casos de legisladores que poseían personas como esclavas entre los siglos XVIII y XX, según determinó el análisis del diario The Washington Post. El estudio examinó censos y otros registros históricos para compilar sus hallazgos.
Se logró determinar que los legisladores que poseían esclavos habían representado a 37 diferentes estados, incluidos los del sur, todos los estados de Nueva Inglaterra, así como los estados del Medio Oeste y el Oeste. Abarcaron una amplia franja del establecimiento político estadounidense y representaron a más de 60 partidos, incluidos los partidos republicano y demócrata, así como a partidos menos conocidos, incluidos los federalistas, whigs, unionistas, populistas, progresistas, prohibicionistas, según los descubrimientos del Post.
Aún así, el partido demócrata tuvo el mayor número de legisladores que, en algún momento de sus vidas, fueron dueños de esclavos. El periódico encontró 606 casos de este tipo. Hubo unos 481 republicanos del Congreso que fueron identificados como propietarios de esclavos. El senador demócrata Corey Booker, quien es solo la cuarta persona negra elegida para servir en el Senado de los EEUU, dijo en una entrevista con el Post: “Hay muy poco reconocimiento del grado en que la esclavitud, esa miserable institución, dio forma al Capitolio”. ”Todo lo que le rodea, el propio Capitolio, fue moldeado por este legado que no conocemos o no reconocemos por completo”, dijo el legislador.
Enfocándose en la Casa Blanca, el documento periodístico determinó que 12 de los primeros 18 presidentes de EEUU poseían personas como esclavas, incluidos ocho que fueron propietarios de personas durante su presidencia. The Washington Post compiló sus hallazgos en una base de datos que también determinó que 3.166 congresistas no poseían esclavos. Hay unos 677 legisladores cuyas investigaciones aún están pendientes. El Post dijo que actualizará su base de datos “a medida que salga a la luz más información”.
