El hecho ocurrió el lunes pasado en Florida, Estados Unidos, donde una pareja abrió la puerta de emergencia del Airbus A321 y activó el tobogán inflable segundos antes de que el avión despegara con destino a Atlanta.
El responsable de este suceso se justificó diciendo que sufría de ansiedad y depresión. “Tengo ansiedad y depresión. Les pedí tres o cuatro veces que me dejaran salir. Dijeron que iban a detener el avión y nunca lo detuvieron, y llegué al punto en que me sentía mareado”, dijo Antonio Murdock
El hombre además asegura que le comentó a la azafata que padecía estrés post traumático después de haber cumplido 10 años de prisión por el robo de un banco. “Entré en pánico. Tengo ataques de pánico. Eso es todo. No le hice daño a nadie”, dijo el pasajero, según CBS New York
Tanto Murdock, de 31 años, como si pareja, Brianna Greco, de 23 años, fueron declarados culpables de conducta delictiva, imprudencia temeraria y entrada ilegal. Además, es probable que deban hacerse cargos de los daños que sufrió la aeronave. Los mismos asciendes hasta los 173 mil dólares.
El avión de la compañía Delta Airlines tuvo que regresar a la puerta de embarque y la totalidad de los 106 pasajeros tuvieron que ser ubicados en vuelos alternativos para poder llegar a sus respectivos destinos.