El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, agradeció este miércoles el apoyo político y de seguridad de Estados Unidos frente a la posibilidad de que Rusia estuviese preparando una nueva ofensiva militar contra su país. A través de su perfil oficial en Twitter, Zelenski informó que mantuvo una reunión con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y agradeció su participación “personal en la reducción de la escalada de la situación en torno a Ucrania”.
Zelenski dijo estar dispuesto a “mejorar la cooperación económica y financiera” con Estados Unidos y estar seguro de que “no habrá ninguna decisión sobre Ucrania sin Ucrania”. Tras Kiev, Blinken tiene previsto viajar a Berlín para conversar con los aliados y luego reunirse con el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en Ginebra. Desde la Embajada de los Estados Unidos en Kiev, Blinken informó que Rusia busca aumentar aún más sus tropas cerca de la frontera con Ucrania. ”Sabemos que existen planes para aumentar esa fuerza aún más en un plazo muy corto”, dijo Blinken, quien agregó que esto le da al presidente ruso, Vladimir Putin, “la capacidad de tomar más medidas agresivas contra Ucrania también en un plazo muy corto”.
Blinken aconsejó seguir el “camino de la diplomacia y el diálogo” para resolver el conflicto en la región. El secretario estadounidense también se reunió con su homólogo ucraniano, Dmitro Kuleba, y acusó a Rusia, durante una rueda de prensa conjunta, de intentar dividir Ucrania. Blinken aseguró que Estados Unidos aumentará la ayuda de defensa a Ucrania en caso de un ataque ruso y enfatizó que su país prioriza una solución diplomática al problema. Por su parte, Kuleba dijo que Ucrania está trabajando para consolidar sus capacidades defensivas y que Estados Unidos es su principal socio. Kuleba aseguró que el problema se resolverá cuando las últimas tropas rusas abandonen la región de Donbás y la península de Crimea.
Rusia ha acumulado recientemente decenas de miles de tropas cerca de la frontera este, lo que genera temores sobre que el Kremlin pueda estar planeando otra ofensiva militar contra su vecino. Sin embargo, Moscú niega estar preparándose para invadir Ucrania y dice que sus tropas solo realizan ejercicios militares.