Ya son más de 2.300 las personas fallecidas y otras miles heridas por el devastador terremoto de magnitud 7,8 que sacudió el lunes por la madrugada al sureste de Turquía y norte de Siria, y cuyos temblores se sintieron incluso hasta en la lejana Groenlandia.
El temblor se sintió a las 4.17 y se produjo a una profundidad de 17,9 kilómetros, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS). El epicentro se situó en el distrito de Pazarcik, en la provincia de Kahramanmaras, en el sureste de Turquía, a unos 60 km de la frontera siria.
Horas después, un nuevo movimiento telúrico de magnitud 7,5 golpeó la zona a las 13.24, a cuatro kilómetros al sureste de la localidad de Ekinozu, según el USGS. También se produjeron una cincuentena de réplicas, según Ankara.
Los temblores del sismo se sintieron hasta en Groenlandia, según el instituto geológico danés.
Es muy probable que el balance se agrave rápidamente, teniendo en cuenta el número de edificios derrumbados en las ciudades más afectadas, como Adana, Gaziantep, Sanliurfa y Diayarbakir, en el sureste de Turquía.
Debido a la hora en que ocurrió el sismo, de madrugada, la mayoría de la gente estaba durmiendo en sus casas.
Por seguridad, se cortó el gas en toda la zona, por las réplicas y por temores a que se produjeran explosiones.
El Kurdistán iraquí informó que suspenderá por precaución las exportaciones de crudo a través de Turquía.
Este sismo es el más importante en Turquía desde el terremoto del 17 de agosto de 1999, que causó 17.000 muertos, un millar de ellos en Estambul.
Según el vicepresidente turco, Fuat Oktay, al menos tres de los aeropuertos del área afectada, Hatay, Maras y Gaziantep, fueron cerrados al tráfico.
Ayuda a Turquía y Siria tras el terremoto
El presidente turco, cuya gestión de esta tragedia tendrá mucho peso en las reñidas elecciones del 14 de mayo, hizo un llamado a la unión nacional.”Esperamos salir de esta catástrofe juntos lo más rápidamente posible y con los menos daños posibles”, tuiteó.
La Unión Europea (UE) y muchos de sus países miembros anunciaron que enviaban ayuda y equipos de rescate.
También lo hicieron Estados Unidos, Israel, India y Ucrania.
El presidente ruso, Vladimir Putin, transmitió sus condolencias a los dirigentes turco y sirio y ofreció “aportar la ayuda necesaria” de Rusia tras esta tragedia.
Azerbaiyán, país cercano a Turquía, anunció el envío inmediato de 370 rescatistas, según la agencia oficial turca.
Turquía está situada en una de las zonas sísmicas más activas del mundo
.Expertos llevan tiempo advirtiendo que un sismo de gran magnitud podría devastar Estambul, que ha permitido construcciones generalizadas sin precauciones.
Un terremoto de magnitud 6,8 sacudió Elazig en enero de 2020, matando a más de 40 personas.
Y en octubre de ese mismo año, otro de magnitud 7,0 sacudió el mar Egeo, causando 114 muertos y más de 1.000 heridos.