Este martes un grupo de protectores de animales encontró a dos osos asiáticos en un sótano ubicado en una tienda de ropa en Son La, una localidad al norte de Vietnam. Los ejemplares fueron rescatados y llevados a un santuario en Ninh Binh, donde les espera una larga recuperación, debido a que su estado de salud está bastante comprometido.
Según reportaron desde la organización mundial de bienestar animal Four Paws, estiman que los dos osos, un macho llamado Xuan y una hembra llamada Mo, vivieron en completa oscuridad durante 17 años dentro de ese sótano y sólo pudieron ver una luz artificial cuando fueron sometidos a procedimientos de extracción de bilis, una sustancia utilizada como remedio en la medicina china tradicional.
Los veterinarios que lideraron el rescate afirmaron estar consternados por las condiciones en las que sobrevivieron estos animales durante tantos años, debido a que las jaulas estaban oxidadas, había mucha suciedad y apenas había ventilación. Además, sus captores los dejaban solos a oscuras durante horas, por lo que no tenían ningún estímulo, como así tampoco contacto con la naturaleza. No obstante, también estaban mal alimentados ya que les daban verduras podridas.
El rescate
Para poder sacarlos del lugar donde estaban encerrados, los rescatistas debieron sedar a Xuan y Mo para luego poder realizarles distintos exámenes médicos. Allí fue donde se comprobó que ambos sufrían una enfermedad de la vesícula biliar por haber sido apuñalados en el órgano con sondas destinadas a extraerles la bilis.
Xuan además tiene sobrepeso, está enfermo del hígado y ha perdido varios dientes por masticar los barrotes de su jaula en sus intentos de escapar.
“Era la primera vez que rescatábamos osos de un entorno sin luz natural y sólo expuestos a la luz artificial. A pesar de haber sido explotados por su bilis durante años, en condiciones tan horribles, tanto Mo como Xuan estaban bastante tranquilos y sin miedo cuando llegamos”, declaró en un comunicado de la organización, Szilvia Kalogeropoulu, la veterinaria de Four Paws que estuvo a cargo del rescate y el traslado de estos animales.
Y luego agregó: “Los examinaremos más a fondo en nuestra clínica del santuario y determinaremos su mejor cuidado futuro. Los osos son muy resistentes, pero aun así será un largo camino de recuperación”.
Llevados al santuario
Los médicos veterinarios les realizaron una primera revisación, en la que a primera vista determinaron la gravedad de los daños en ambos mamíferos.
Luego, los dos ejemplares fueron subidos a un camión para ser transportados al santuario en Ninh Binh, que queda a nueve horas de camino.
Se trata de un refugio para los osos rescatados del comercio ilegal de bilis, pero también un centro de concientización sobre la vida silvestre en Vietnam.
Desde Four Paws explicaron que algunos de los 40 osos negros asiáticos que ya viven en el santuario no sólo eran víctimas de la extracción de bilis antes de ser rescatados, sino también del tráfico ilegal de animales salvajes.