Un oso polar mató a una mujer y a su bebé de 1 año tras un ataque extremadamente inusual en un aislado pueblo ballenero de Alaska. Un miembro de la comunidad lo mató a balazos.
El ataque fatal, el primero en Alaska en más de 30 años, ocurrió el martes cerca de la entrada principal de la escuela de Wales, una aislada comunidad costera en el Estrecho de Bering, en el extremo occidental de Alaska, donde es habitual coexistir con los osos polares.
Los directivos de la escuela se apresuraron a meter a todas las personas al edificio después de que vieran al animal, según explicó la administradora principal del distrito escolar del Estrecho de Bering, Susan Nedza, en declaraciones al Anchorage Daily News desde su oficina en Unalakleet.
“El oso intentó entrar con ellos”, relató Nedza, pero la directora Dawn Hendrickson “golpeó la puerta” para mantenerlo fuera. “Es aterrador. No es algo para lo que estés preparado”, dijo Nedza.
Los empleados bajaron las persianas de la escuela, cerraron el edificio y pidieron auxilio. La Patrulla Estatal de Alaska identificó a las víctimas como Summer Myomick, de 24 años, de Saint Michael, y a su hijo Clyde Ongtowasruk, de 1 año.
“Son momentos muy, muy tristes para Saint Michael y Wales”, dijo Virginia Washington, la administradora de la ciudad de Saint Michael, quien agregó que Myomick pasaba tiempo en las dos comunidades. “Era una joven muy dulce, era muy responsable”, comentó Washington a The Associated Press.
Cambio climático y osos polares
Como muchas aldeas remotas de Alaska, esta comunidad de unos 150 habitantes en Wales, predominantemente indígenas inupiaq, organiza patrullas cuando se espera la llegada de los osos, de diciembre a mayo. El último encuentro mortal con un oso polar en Alaska había sido en 1990.
El mal clima y la falta de luces de aterrizaje en la pista del aeródromo de Wales evitaron que los agentes de Policía y funcionarios de vida silvestre llegaran el martes a Wales después del ataque. El miércoles se realizaban nuevos intentos.
Geoff York, director sénior de conservación de Polar Bear International, dijo que no está claro si este ataque está relacionado con el cambio climático, pero es coherente con lo que se espera a medida que el Ártico sigue calentándose cuatro veces más rápido que el resto de la Tierra, cambiando el ecosistema de formas que aún no se comprenden del todo.