Según fuentes del Wall Street Journal, Arabia Saudita planea construir una ciudad colosal, que muy probablemente pase a ser una de las estructuras más grandes del mundo. Se trata de la megaciudad NEOM, en las imágenes del proyecto la misma se asemeja a una ciudad extraída de una película de Ciencia Ficción.
El megaproyecto tendrá un costo de casi un billón de dólares y fue anunciado por el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, en enero de 2021. El mismo implicaba la construcción de dos rascacielos espejados, denominados ‘Mirror Line’, que incorporarán agricultura vertical integrada en los edificios, revelaron documentos vistos por WSJ. Además, incluirá un puerto deportivo para yates.
Las verduras se “cosecharán y empaquetarán de forma autónoma” y se trasladarán a “comedores comunitarios” y “cocinas de convivencia”, mostraron los documentos, y los residentes de los edificios pagarán una suscripción para que se les sirva el desayuno, el almuerzo y la cena.
Se construirá un puerto deportivo para yates debajo de un arco entre los dos edificios espejados y también se construirá un estadio deportivo a 300 metros de altura.
Otro plan ambicioso para el megaproyecto incluye un tren de alta velocidad que pasará por debajo de los edificios espejados.
En junio, fuentes le dijeron al portal Al Arabiya que hay planes para dos rascacielos de alrededor de 500 metros de altura que se extienden por 170 kilómetros. La ciudad lineal, la primera de su tipo, será una zona de contaminación cero y se extenderá desde la costa del Mar Rojo hacia el interior del desierto.
La ciudad fue concebida por el príncipe Bin Salmán para diversificar la economía del reino y dejar de depender del petróleo, así como para atraer inversiones extranjeras y crear miles de nuevos puestos de trabajo.
Dudas sobre la construcción
Con la fecha límite de finalización en 2030, el proyecto se enfrenta a un desafío único: la curvatura de la tierra, informó WSJ.
Debido a que la tierra se arquea alrededor de ocho pulgadas por milla, los diseñadores involucrados en el proyecto propusieron dejar un espacio en la parte superior de los módulos para “doblar” las estructuras.
Otro desafío que plantean los dos rascacielos paralelos entre sí es la sombra que crean, lo que provocaría falta de luz solar, lo que, según los expertos, podría ser perjudicial para la salud de los residentes.
Y hay otros desafíos a resolver como la gestión de la migración de millones de aves a través de los corredores que cruzarán las enormes edificaciones.
Además, existe la preocupación de que el enorme tamaño de la construcción cambie la dinámica del flujo de aguas subterráneas y restrinja el movimiento de animales.