El candidato a la presidencia de Ecuador por el Movimiento Construye, el exasambleísta Fernando Villavicencio, fue asesinado hoy a tiros por sicarios durante un acto en una escuela del norte de Quito.
El exlegislador y aspirante al Palacio de Carondelet fue trasladado a una clínica cercana al sector, donde se confirmó su fallecimiento, que fue anunciado por el ministro del Interior, Juan Zapata, y rápidamente reportado por medios capitalinos.
En septiembre del año pasado su casa había sido baleada pero él sorteó aquel ataque, y en esta campaña hacia las elecciones del domingo 20, Villavicencio era el único candidato que no había aceptado la custodia policial que el Gobierno ofreció a los postulantes.
El diario digital Primicias detalló que la línea de emergencia de la Policía recibió alrededor de las 18.20 (20.20 en la Argentina) un alerta por una balacera en Quito.
Fueron entre 30 y 40 disparos, según relatos de testigos que citó el canal Teleamazonas, y Villavicencio fue trasladado a la Clínica de la Mujer, pero murió en el lugar.
Según los primeros informes, hubo otros heridos durante el atentado a Villavicencio.
La Policía hizo un barrido por la zona para descartar la presencia de explosivos y cerró de inmediato el tránsito.
El periodista Christian Zurita, amigo del candidato y coautor de varias investigaciones junto a Villavicencio, estaba en el evento y reportó el tiroteo desde Twitter.
“Nuestro más sentido pésame y profunda solidaridad con los seres queridos de Fernando Villavicencio. Qué Dios lo guarde en su gloria”, publicó enseguida el también candidato presidencial y exvice Otto Sonnenholzner.
Otro aspirante al Ejecutivo, Yaku Pérez, también se mostró consternado “por el trágico y condenable asesinato de Fernando Villavicencio”.
“Este hecho no quedará en la impunidad, Ecuador no merece una muerte más; es momento de unirnos y recuperar la Paz”, agregó Pérez.
Periodista, fundador de la organización indígena Pachakutik en 1995, llegó a la Asamblea Nacional (AN, parlamento) en 2021 como candidato del Movimiento Honestidad.
Cuando el presidente Guillermo Lasso dispuso la llamada "muerte cruzada", que obligaba a elecciones presidenciales, fue de los primeros en conformar una alianza para ser candidato.
Pese a que estaba amenazado, el Consejo Nacional Electoral y el ministro Zapata confirmaron esta misma semana que era el único aspirante presidencial sin custodia.