Los cuerpos de rescate hallaron los restos de otras 10 personas en las ruinas del edificio derrumbado el pasado 24 de junio en Surfside, Florida, con lo que el saldo de muertes asciende a 46.
La búsqueda de víctimas alcanzó el miércoles su decimocuarto día. Más de 100 personas aún están desaparecidas y surgen mensajes cada vez más sombríos de las autoridades.
Los equipos excavaron el martes en el concreto pulverizado que quedó amontonado donde antes se alzaba el edificio sur de las Champlain Towers, llenando baldes que iban pasando por una cadena humana antes de ser vaciados y devueltos a la primera línea de los esfuerzos.
El martes se permitió a la prensa ver de cerca parte de los trabajos en marcha. Los bomberos también publicaron varios videos y se anunció el hallazgo de ocho nuevos cuerpos, la cifra más alta en un día desde que comenzó la operación. La lluvia y el viento de la tormenta tropical Elsa complicaban la labor, aunque se esperaba que el ojo de la tormenta tocara tierra en el norte de Florida, relativamente lejos del lugar.
Los equipos no han encontrado nuevos indicios de sobrevivientes, y aunque las autoridades dijeron que su misión aún iba dirigida a encontrar personas vivas, estaban cada vez más pesimistas.
”Ahora mismo estamos en modo de búsqueda y rescate’', dijo el director de la policía del condado, Freddy Ramirez, en una conferencia de prensa el martes por la noche. “Nuestro objetivo principal ahora es llevar una resolución a las familias”.
Nadie ha sido rescatado con vida desde las primeras horas del derrumbe del edificio el 24 de junio, cuando muchos de sus residentes dormían.
Los rescatistas seguían buscando huecos en las montañas de escombros donde pudieran encontrarse otros sobrevivientes, explicó el jefe de bomberos del condado, Alan Cominsky. ”Por desgracia, no estamos viendo nada positivo”, informó.
La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, dijo que las familias de los desaparecidos se estaban preparando para la noticia de una “pérdida trágica”. Dijo que el presidente Joe Biden, quien visitó el área la semana pasada, llamó el martes para ofrecer su apoyo continuo.
”Creo que todos estarán listos cuando sea el momento de pasar a la siguiente fase”, dijo la alcaldesa.
Elsa se degrada de categoría
Elsa se debilitó hasta convertirse en una tormenta tropical a medida que se acercaba a la costa del Golfo de Florida en las primeras horas del miércoles aunque seguía dirigiéndose hacia el continente con vientos racheados y fuertes lluvias, indicó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.
La advertencia de huracán para gran parte de la costa oeste del estado ha sido sustituida por una advertencia de tormenta tropical, dijo el NHC, a pesar de que, según el organismo, la fuerza de Elsa puede aún variar antes de tocar tierra.
La tormenta se ubicaba unos 115 kilómetros al noroeste de Tampa con vientos máximos cercanos a los 100 km/h, dijo el NHC en un comunicado reciente.
Ante el aumento esperado del nivel del agua hasta 1,5 metros debido a los vientos, el aeropuerto de Tampa anunció la suspensión de vuelos comerciales desde las 17 locales y hasta al menos las 10 del miércoles.
Por su parte, la vicegobernadora de Florida, Jeanette Nuñez, exhortó a los habitantes del estado a aprovisionarse de agua y alimentos y prepararse para posibles cortes de electricidad durante unos días.