La coalición que combate en el conflicto en Yemén liderada por Arabia Saudita afirmó este martes haber matado a más de 130 rebeldes hutíes durante las últimas 24 horas en ataques dentro y cerca del bastión progubernamental de Marib, en el norte del país.
Desde octubre, esta coalición ha estado informando casi cotidianamente sobre un alto número de muertos entre los insurgentes, al repeler su ofensiva contra la ciudad de Marib, capital de la provincia homónima y último bastión del gobierno en el norte.
En cambio, los hutíes, apoyados por Irán, raramente informan sobre sus bajas, que habrían superado las 3.700 en las últimas semanas, siempre de acuerdo a la coalición, balance que la AFP no ha podido verificar a través de fuentes independientes.
“Dieciséis vehículos militares han sido destruidos y más de 130 elementos terroristas abatidos” en los últimos ataques, afirmó la coalición mediante un comunicado difundido por la agencia oficial saudita de noticias SPA. Añadiendo que los operativos tuvieron lugar en las provincias de Marib y Al Bayda.
Por su parte, los hutíes ya habían hecho un gran esfuerzo para apoderarse de la ciudad de Marib en febrero pasado, y reanudaron su ofensiva en septiembre. También se ha informado sobre combates en un frente aparte, sobre la costa del Mar Rojo en Yemén, después de que las fuerzas hutíes empujaran hacia el sur en los últimos días. La coalición informó este martes que atacó cuatro posiciones hutíes a lo largo de la costa occidental del Mar Rojo.
Por otra parte, un avance hutí cerca de un puerto clave en Yemén, ubicado en la provincia occidental de Hodeida, provocó un retroceso saudita acompañado del desplazamiento de más de 6.000 personas, de acuerdo a lo que ha informado la ONU al respecto.