Los funcionarios hutíes de Yemen recibieron con beneplácito los llamados al diálogo con la Coalición Árabe liderada por Arabia Saudita, pero pusieron como condición que las conversaciones se celebren en un país neutral. Según una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores afiliado a los hutíes, los rebeldes señalaron que el país no debe estar involucrado en la guerra en Yemen.
La declaración, citada por la agencia de noticias Saba, administrada por el grupo, enfatizó que las conversaciones y la paz son las posiciones principales del gobierno proclamado por los hutíes, con sede en la capital, Saná. Este jueves, el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) invitó a las partes en el conflicto en Yemen a mantener conversaciones en la capital saudita, Riad, el 29 de marzo, para abordar la paz integral en el país.
Yemen ha estado sumido en la violencia y la inestabilidad desde 2014, desde que milicias rebeldes hutíes alineadas con Irán capturaron gran parte del país, incluida la capital, Saná. Una coalición liderada por Arabia Saudita destinada a restablecer el Gobierno yemení ha empeorado la situación, provocando una de las peores crisis humanitarias en el mundo, según las mismas Naciones Unidas.
Alrededor de 30 millones de personas necesitan asistencia humanitaria y protección, casi el 80%, y más de 13 millones se encuentran en peligro de muerte de hambre, según estimaciones de la ONU.