Nunca antes habíamos tenido la cantidad de contenido de entretenimiento que existe en la actualidad ni tampoco había sido tan sencillo consumirlo.
Todo esto es posible gracias a la conexión hogareña a internet y a los datos móviles. Sin embargo, en la abundancia, el propio peso del streaming amenaza con hacerlo colapsar.
El consumo online legal parecía la solución definitiva ante el creciente negocio de las descargas ilícitas, ese mal que aquejó a la industria del entretenimiento cuando la internet llegó por primera vez a los hogares hace ya casi tres décadas, pero la piratería nunca desapareció y, según expertos, el 2023 mostró que volvió con más fuerza que antes.
La piratería no ha muerto
Un análisis hecho durante el Seminario Regional Antipiratería, organizado por Telecom Argentina y respaldado por Asiet, Certal, la Asociación Argentina TIC, Video y Conectividad (ATVC), Red Intercable y la Cámara Argentina de Internet (Cabase), realizado en agosto del año pasado en Buenos Aires, reveló que el problema de la piratería sigue sin resolverse en nuestro país.
Pablo García De Castro, director para el Cono Sur y Relaciones Institucionales de Asociación Interamericana de Empresas de Telecomunicaciones (Asiet) reveló en ese encuentro: “A partir de la pandemia hubo un crecimiento de la oferta formal de contenidos en línea. Sin embargo, no se redujeron las visitas a sitios ilegales y los usuarios que consumen contenido ilegal aumentaron”.
Según el experto de Aciet, el resultado de estas búsquedas da un número impresionante: “El 40 por ciento de las visitas a contenido audiovisual es a sitios no oficiales”
¿Por qué crece la piratería?
Esa pregunta es la que buscan responder varios estudios y la causa parece estar en dos fenómenos: la inflación y la multiplicidad de plataformas de streaming.
Cuando Netflix reinaba casi en soledad para ofrecer contenidos online poseía títulos de grandes estudios como Disney, la desaparecida Fox, Warner o Universal. O sea, todo el contenido se concentraba en un solo espacio y el usuario pagaba para verlo en un solo sitio. Esa concentración además hizo disminuir las descargas ilegales. Sin embargo, cada empresa decidió dejar de licenciar su contenido para tener su propio espacio y forzaron al usuario a sumar una cantidad insensata de plataformas. Para seducirlo comenzaron a producir contenido propio pero el costo se disparó.
Muchas plataformas, contenido desperdigado y precios más altos empujaron al usuario a buscar una solución en apariencia más simple: descargar contenido de manera ilegal.
Para muchos consumidores, especialmente los argentinos, a la hora de recortar gastos prefirieron dar prioridad a la conexión a internet antes que sostener económicamente a cada plataforma.
Los números en Argentina
Además de que 4 de cada 10 búsquedas sea a sitios de descarga ilegal, un informe previo de Asiet sumado al más reciente reveló que en nuestro país los usuarios únicos que consumen contenido pirata en vivo se triplicaron entre 2020 y 2023 y superaron los 14.3 millones mensuales.
El estudio señala además que en Argentina la demanda de contenido ilegal en vivo es de 35% mientras que el promedio de la región es de 20%.
“La oferta de piratería se está concentrando: hay grandes jugadores que concentran las visitas de los usuarios, lo que significa que tienen un gran negocio”, señaló García De Castro al sitio DLP News al referirse a datos del informe.
Por ejemplo, 26% de todas las visitas de contenido ilegal en Argentina fueron a tres sitios, todos relacionados al deporte y a la cabeza está el sitio Fútbol Libre con 4.6 millones de usuarios únicos al mes.
Lo más buscado
Un informe de MUSO, una consultora dedicada a brindar soluciones de seguridad a empresas de medios y entretenimiento, reveló que la película más pirateada del 2023 fue Barbie. O sea que el film no solo fue el que más recaudó en taquilla de cines sino también en el circuito ilegal. En total se encontraron 4,19 millones de páginas de descargas con el nombre de la película.
En la lista, muy por detrás de Barbie, le siguió la cinta de terror Five Nights at Freddy’s, con 131.000 sitios de descarga.
La serie más pirateada también fue una de las más vistas de manera oficial: el animé japonés One Piece. Esta producción original de Netflix se encontró en 440.000 páginas de descarga
En la música, el artista Drake fue el más pirateado con 303.000 páginas de descarga y en el ámbito del videojuego el primero de la lista fue Spider-Man 2, con 136.000 páginas.
El informe revela que estos son sólo cifras de descarga y no se cuentan las visualizaciones en streaming debido a que no se puede acceder a esos datos pero se estiman en millones.
Gratis pero inseguro
La piratería seduce no solo por que no cuesta dinero sino porque actualmente se puede conseguir contenido en resolución 4K, con subtítulos y sonido de alta calidad. Sin embargo, no todo lo que brilla es oro.
El informe sobre piratería en Argentina revela que de los 50 sitios ilegales con más visitas, cuatro mostraron contenido adulto explícito y 26 contaron con anuncios durante la reproducción.
También se descubrió que para acceder al contenido pirateado, en promedio, cada usuario necesita hacer siete clicks mientras que antes, según un informe previo de Asiet, era de solo cuatro clicks. O sea, creció la cantidad de publicidad y riesgos de exposición a malware al intentar descargar contenido.