Desde la aparición de ChatGPT la relación entre la sociedad y la inteligencia artificial se hizo mucho más próxima. Es que con su lanzamiento en noviembre de 2022, y su consolidación a lo largo de 2023, el impacto en la vida cotidiana de dicha herramienta pasó a ser moneda corriente.
Pero junto con el impacto de la novedad que supuso la nueva plataforma, también llegaron algunas controversias: abogados que le pedían a la IA que redactaran sus argumentos para los juicios, legisladores que pronunciaban discursos hechos por la herramienta y una profunda preocupación en los sistemas educativos de todo el mundo ante la facilidad de emplear la app para fraguar trabajos y exámenes.
No obstante, la fascinación con ChatGPT siguió: es que la plataforma capturó la atención de millones debido a que interactúa con el ser humano a partir de diálogos fluidos y con lenguaje natural, con la capacidad de contextualizar las consultas de los usuarios y hasta de entender algunas expresiones ambiguas.
Qué es Perplexity
Sin embargo, desde hace unos días apareció otra herramienta que se presenta como un híbrido entre ChatGPT y Google y supone un desafío para ambos. Se trata de Perplexity AI, un motor de búsqueda conversacional que ofrece a los usuarios respuestas a sus preguntas en forma de diálogo –como en ChatGPT- pero que a la vez brinda un menú de fuentes informativas a partir de las cuáles confecciona dichas respuestas.
Esto es así porque busca darles a los usuarios el contexto necesario para ir a los creadores primarios de la información y poder chequear y contrastar la misma. A modo de descripción, a la plataforma se accede a través de la dirección www.perplexity.ai y en ella hay una home bastante simple, compuesta por una columna a su izquierda con un panel de opciones acotadas, entre las que se destacan una barra de búsqueda, el botón para ir al inicio y un historial.
En el centro de la pantalla aparece un cuadro de búsqueda, donde los usuarios introducen sus consultas –tal y como si se tratara de una barra de búsqueda en Google-. Al realizarle una pregunta o ingresar cualquier sentencia, Perplexity responde al estilo ChatGPT: de forma progresiva y en lenguaje natura va desarrollando la información.
Las semejanzas y diferencias de Perplexity con ChatGPT y Google
Una de las diferencias centrales entre Perplexity y ChatGPT es que en el caso de la IA recientemente lanzada ofrece respuestas en forma de texto conversacional y, por encima de ese texto, aparecen en forma de tarjetas una serie de sitios webs a modo de citas para informar sobre el o los lugares de donde se extrajeron los datos.
Otra diferencia fundamental es que ChatGPT se alimenta con la interacción y el aprendizaje a partir de consultas de usuarios y de las actualizaciones periódicas de información proveniente de internet. En el caso de Perplexity el aprendizaje existe, pero la fuente primaria de información es la conexión en tiempo real a web, por lo que los datos que se muestran son actualizados.
Ahora bien, si se lo compara con Google las diferencias siguen emergiendo: cuando se consulta algo a este buscador, devuelve por respuestas una serie de sitios webs que se ordenan según factores de clasificación, entre ellos el SEO.
Perplexity AI, por el contrario, procesa la consulta, busca la respuesta a partir de las fuentes que entiende relevantes y a partir de allí presenta la respuesta en forma de conversación. Luego entrega esas fuentes para que los usuarios puedan cotejar y ampliar según su interés.
Cambios en los consumos y el desafío para la industria de los medios
El avance de la Inteligencia Artificial en los buscadores, sumado a la progresiva consolidación del modelo conversacional como vínculo entre el usuario y la plataforma, suponen un profundo desafío para la industria de los medios de comunicación.
Es que si el paradigma se consolida, el periodismo tendrá que reformular otra vez la forma en la que produce sus contenidos. Esto es porque luego del paso del soporte físico al digital la industria centró su modelo de negocio en gran parte a través del clic en las noticias.
Ahora, la IA ofrece al lector la respuesta ya digerida sobre lo que ese usuario buscó y –en el mejor de los casos, como Perplexity- los diarios podrían quedar relegados a una mera cita bibliográfica. Resta saber cómo contrarrestará Google este avance, aunque ya anunció que su IA conversacional pasará de Bard a Geminis
