Las clásicas máquinas tragamonedas que estaban en las salas de video eran un desafío para más de uno que se ilusionaba con colocar una ficha y recibir una avalancha de metales para seguir jugando. Pero con el paso de los años y el desembarco de la tecnología, tanto salas de videojuegos como este tipo de dispositivos quedaron en desuso.
Sin embargo, en Japón le encontraron la vuelta para traer de regreso a este clásico pero con un premio considerablemente mayor. Es sabido que existen dificultades para la fabricación y comercialización mundial de microchips, por eso en el país asiático los dispositivos pensados para devolver fichas o monedas ahora entregan estos elementos de la informática.
Según lo detalló el portal 20minutos.es, el aparato está repleto de cajas de procesadores AMD Ryzen 5000, que se tratan de los últimos chips de AMD que son los más potentes. Para que el tragamonedas saque uno de ellos, las personas deben depositar unas cuantas monedas en su interior y se llevarán un premio seguro.
Para participar, el cliente debe pagar 8 euros a cambio del chip. Sin embargo, ese producto no tiene que ser realmente un procesador Ryzen 5000, sino chips antiguos y casi todos de segunda mano.
La ‘trampita’ del juego es que los componentes metidos en cajas no son modelos de última generación. Según un cartel que está colocado en la propia máquina expendedora, el premio es aleatorio por lo que la publicidad no es engañosa.
Según lo denunciaron en YouTube, por lo general los procesadores que se obtienen son inservibles, ya que, al tratarse de chips antiguos, son incompatibles con los componentes que se utilizan en la realidad.
No obstante, la oportunidad de lograr un AMD Ryzen 5000 en esa máquina expendedora por 8 euros realmente sale más rentable si se compara con los más de 300 euros que valen en la actualidad.