Pedalear, caminar, trepar, cabalgar, deslizarse, fotografiar, conocer, disfrutar y una infinidad de acciones que se concentran en un mismo sitio, Mendoza. Una provincia que cada vez ofrece más atractivos para disfrutar en grupo, en familia o con amigos. Ideal para una escapada de Semana Santa y, por qué no, vacaciones de invierno.
La montaña que nos caracteriza es un escenario excelente para la práctica de deportes extremos y de aventura, pero también para los que se disfrutan de los paseos tranquilos cerca de algún río o embalse. Los más osados o experimentados sin duda buscarán las rocas para practicar escalada o hacer ascensionismo, en distintas paredes y cerros que hay que aprovechar antes de que la nieve o el frío excesivo impida movernos por esos sitios.
Para el trekking, caminatas, mountain bike, cabalgatas, rappel, canopy o tirolesa, Mendoza posee un abanico de posibilidades, en lugares como Cacheuta, Uspallata, Vallecitos, Potrerillos, Villavicencio, el Valle de Uco, Malargüe y San Rafael en el sur mendocino.
Los amantes del 4x4 pueden acceder a circuitos establecidos como las dunas de El Nihuil en San Rafael; la Ruta 13 en Las Heras, el paraje El Retiro en Lavalle y la Payunia de Malargüe.
A todo esto se suma el turismo de bodegas, recorriendo los Caminos del Vino –que en Semana Santa seguramente estarán engalanados con la música clásica- en el marco del turismo enológico, que permite no sólo disfrutar de días hermosos, si no también aprender sobre el proceso de elaboración de productos y degustación.
Así, entre naturaleza y servicios, Mendoza tiene una buena paleta de posibilidades para disfrutarla. Siempre es aconsejable estar atentos a recomendaciones para transitar sus rutas, especialmente en zona de montaña.
POTRERILLOS. UN MUNDO DE SENSACIONES
Aunque está cerca y es más que conocido por los mendocinos, Potrerillos –con el marco inigualable del dique- ofrece actividades diferentes para ir a pasar un día o un fin de semana en familia y sin grandes movimientos para quienes tienen pocos días disponibles pero quieren algo de aire libre. En la zona también hay algunas opciones gastronómicas para degustar comida tradicional y a las brasas que vale la pena conocer.
Canopy o tirolesa (desplazamiento en altura con un arnés y una polea por un cable de acero para cruzar cañones y ríos), escalada, rappel (descenso con sogas por una pared vertical) son algunas de las opciones más re queridas y aptas para todo público; siempre contratando empresas debidamente habilitadas.
El trekking en la zona recorre diversos senderos de la precordillera y la cordillera, con vistas del Cordón del Plata mientras que las cabalgatas son otra opción y las hay principiantes y otros de dificultad moderada. Cuando se elige una opción de día completo, que toma unas 5 a 7 horas de cabalgata, la actividad por lo general se complementa con un asado criollo.
Otra posibilidad que ofrece Potrerillos es pedalear tanto en las orillas del dique como en los senderos que ofrece la zona para realizar mountain bike. Como sucede con otras disciplinas, hay diversidad de recorridos, con distintos grados de dificultad y siempre es recomendable contratar a guías experimentados y conocedores de la zona.
LOS VOLCANES DE LA PAYUNIA. INMENSIDAD DE MILLONES DE AÑOS
Con altas chances de ser declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO, esta inmensidad en Malargüe cuenta con más de 800 conos volcánicos y ofrece la posibilidad de intuir lo que sucedió en la tierra millones de años atrás.
El recorrido puede realizarse en camioneta propia o contratar una excursión pero se recomienda contratar servicios de guías tanto para no perderse en esa inmensidad como para aprovechar mejor el paisaje.
A mitad de camino, en la “Pasarela”, el paisaje regala una muestra de lo que será el resto de nuestro día entre restos volcánicos y una especie de desierto negro que –millones de años atrás, más precisamente en el Cuaternario- estuvo cubierto por volcanes en ebullición y lavas ardientes, sedientas por derramarse y mostrar su poder.
Los visitantes pueden caminar por allí, empezar a sentir el silencio y la inmensidad de las inabarcables 450.000 hectáreas que posee la reserva natural La Payuni con la posibilidad de seguir viaje o de llegar sólo hasta allí para conocer este mágico lugar.
CON ALTAS CHANCES DE SER DECLARADA PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD POR LA UNESCO, LA PAYUNIA CUENTA CON MÁS DE 800 CONOS VOLCÁNICOS Y OFRECE LA POSIBILIDAD DE INTUIR LO QUE SUCEDIÓ EN LA TIERRA MILLONES DE AÑOS ATRÁS.
DESCUBRIR MENDOZA DESDE EL AIRE
Asomarte a 3.000 metros de altura y decidir saltar en paracaídas para vivir el momento extremo puede ser la mejor experiencia de tu vida. Pero si se elige quedarte a bordo del avión, el recuerdo también será imborrable. Incluso, sentirte un pájaro o un personaje de Julio Verne en su Vuelta al mundo en 80 resulta posible en Mendoza.
Parapente, paracaidismo, vuelos bautismo y paseos en globo. Para cada uno de ellos existen empresas u organismos que acreditan experiencia y que tratan de brindar la mayor comodidad y seguridad posible para el aventurero.
Para lanzarse a la práctica de parapente existen vuelos de bautismo, que se realizan siempre teniendo en cuenta las condiciones meterológicas. El lugar más cercano para montarse en ellos es el Cerro Arco. También en la zona del Manzano Histórico y en San Rafael.
LAS LEÑAS CON Y SIN NIEVE
El Valle de Las Leñas también se destaca en esta época por su plan de aventuras en el hermoso predio 2.240 metros sobre el nivel del mar, en el que la naturaleza, aventura y relax se conjugan para atrapar a chicos y grandes. Entre las opciones de ecoturismo la observación y conocimiento del medio ambiente van de la mano con el trekking, mountain bike o cabalgatas por parajes soñados.
Un paseo en la nueva Telesilla Minerva II, visita a Laguna Niña Encantada y Pozo de las Ánimas, son otras posibilidades. Para entrar en acción tirolesa, escalada, rappel, puente comando y travesías en cuatriciclo, todo con guías profesionales y equipos. Y si aún queda espíritu expedicionario Laguna Escondida en 4×4, Experiencia Valle Hermoso y Cabalgata al Avión de los uruguayos, tres de las propuestas más interesantes por los paisajes que conllevan.
Para las vacaciones de invierno y quienes disfrutan de los deportes de nieve, Las Leñas ya es un clásico que año tras año incrementa servicios a sus ya codiciadas pistas.
SAN CARLOS. EN BICI POR LA VIEJA RUTA 40 Y LAS HUAYQUERÍAS
Son diez kilómetros de lo que, 50 años atrás, era el trazado original de la mítica ruta que atraviesa el país. Recuperada como espacio público, está prácticamente intacta. El recorrido es autoguiado pero las paradas y el paisaje pueden contar la historia de un lugar maravilloso y atípico para la región.
El comienzo del recorrido es muy fácil de identificar. Hay que pasar el puente del río Tunuyán sobre la ruta 7 y meterse apenas unos metros. Allí está el cartel que anuncia que estamos ante el inicio del recorrido de la bicisenda rural –que bordea fincas tradicionales como la Toso y atraviesa una de las zonas más húmedas del Valle de Uco y que la travesía será placentera. El recorrido puede hacerse en familia porque es de baja dificultad.
En tanto, hacia el este de San Carlos, una vez que se atraviesan los campos y las dunas comienza el desierto al que se le denomina Huayquerías hecho de tierras arcillosas. Son pocos los que los conocen y, en parte, es porque es muy fácil perderse en la zona. Sin embargo, el lugar es ideal para realizar mountain bike y aventurarse a terrenos distintos y agrestes pero –sobre todo- vírgenes.
En esta zona hay al menos diez circuitos que se pueden hacer de manera guiada. Lo ideal es ingresar con gente de la zona que conoce esos recovecos desde que nació. Antes de ir, consultar por los guías en la Dirección de Turismo de la comuna.
Texto y fotos, gentileza: mendozaextremo.com