El diseño de objetos es valorado en estos tiempos no solo por el asombro que despiertan sus formas y conceptos sino por la posibilidad de conjugarlos con funcionalidad para el hogar y la vida cotidiana.
Las firmas o casas de diseño más famosas del mundo proponen con base en la vanguardia una serie de tendencias que seguramente podrás aplicar a la fisonomía de tu propio hogar.
No hace falta comprar estos mismos prototipos sino que con inspirarse, basta. Por eso te aportamos cuatro ejemplos que hablan más allá de sí mismos.
Lámparas de autor
El diseñador Jordi Canudas (Barcelona, 1975) sabe jugar con la materia y, en particular, con la pintura.
Su “Dipping Light”, que ahora produce el fabricante catalán Marset, es nada menos que una lámpara de autor que tiene mucho de ensayo científico: una bombilla encendida es sumergida varias veces en pintura y, con cada inmersión, se dibujan círculos concéntricos que atrapan la luz, atenuando la intensidad.
Sillas impresas en 3D
Nagami presenta las sillas impresas en 3D por Zaha Hadid Architects. Serán presentadas dentro de la feria por el grupo de diseño Nagami.
El proyecto, titulado “Brave new world: re-thinking design and large-scale robotic 3D printing”, comprende cuatro diseños de sillas de vanguardia: “Rise” y “Bow” de Zaha Hadid Architects, “Robotica TM” de Ross Lovegrove, y “Peeler” por Daniel Widrig.
Objetos reutilizables en Holanda
Este país está inmerso en las búsquedas de diseño y ecodiseño en el último año. Bajo estos conceptos se nutren de tres claves: reciclaje, humor y creatividad desbordante.
¿Un ejemplo? El asiento Tejo Remy. Este creador evoca los recuerdos vitales agrupando cajones y cajas, y crea cómodos asientos a partir de colchas dobladas.
Diseñador industrial y de interiores, Remy se distingue por dotar de vida a objetos cotidianos que han sido desechados por la gente.
Bomboca, el sofá modular de Louis Vuitton
Conformado por ocho piezas desmontables que se pueden utilizar separadamente como pufs, está inspirado en la concha en la que viaja la diosa Venus del cuadro de Botticelli.
Durante 160 años la firma francesa se ha dedicado a explorar nuevos territorios y a reflexionar sobre la idea del viaje. A través de sus históricos baúles y, después, mediante sus maletas más funcionales y contemporáneas, ha contribuido al mundo del diseño y la funcionalidad.
La casa francesa emprendió en 2011 su proyecto “Objetos nómadas”, cuyo objetivo era y es mantener viva esa tradición por crear artesanalmente artículos de viaje, al tiempo que se investigan nuevas formas que incluyan esa idea de movilidad.
Así y de mano de los hermanos Campana la idea de “El nacimiento de Venus” (el cuadro que les ha llevado a crear su último objeto nómada) Venus se desliza sobre el mar en una enorme concha, cuya silueta y su relieve ondulado dan forma al asiento “Bomboca”.
“Después de todo, viajar ofrece la posibilidad única de embarcarse en una nueva exploración, una forma de permitir a uno mismo probar un nuevo diseño”, argumentan.
