La propuesta de celebrar los 65 años del Instituto Nacional de Tecnología Industrial tiene como objetivo acercar nuestras capacidades tecnológicas, ampliadas, al entramado productivo de cada región del país. Para que esto sea posible lo debemos concretar a través de una dinámica articulada, y como parte del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, entre actores públicos y privados, con los gobiernos provinciales y locales, con las cámaras empresarias y pymes, con las universidades y organismos del sistema científico-tecnológico.
Para avanzar en esta construcción colectiva hemos comenzado con un trabajo interno, recuperando y sumando capacidades, estableciendo canales permanentes para la articulación de agendas, como lo venimos consolidando con el Consejo Asesor de Cuyo desde hace más de un año de trabajo conjunto.
En cada encuentro haremos eje en aquellas temáticas centrales para pensar en los desafíos que enfrentan nuestros productores e industriales nacionales, en un mundo cambiante y competitivo; como la sustentabilidad, la transformación digital y el paradigma hacia la industria 4.0; el desarrollo de proveedores nacionales, la internacionalización de los bienes y servicios de cada provincia del país.
Uno de los ejes estratégicos de las jornadas en la región, que se abordarán en San Juan durante el 30 de junio y 1 de julio, será el de las energías renovables, desde la perspectiva de su contribución a la transición energética, fomentando una economía gradualmente con menores emisiones de carbono, como desde la mirada productiva y tecnológica. La región de Cuyo se destaca por la disponibilidad de recursos energéticos renovables, como el sol, el viento y la biomasa y por el desarrollo industrial y tecnológico a través de sus instituciones del conocimiento, sus industrias y emprendedores.
Desde INTI, favorecemos y articulamos el desarrollo industrial a través de centros tecnológicos especializados. En la jornada del 30 de junio, con la participación de destacados panelistas, podremos tener una mirada amplia de las energías renovables, desde una perspectiva global hasta las oportunidades y desafíos locales, con el objetivo de trazar una agenda energética, ambiental y productiva para el desarrollo de la región.
Una segunda temática a desarrollar, el 1 de julio, será la de los alimentos. Nuestro país tiene amplio reconocimiento y tradición en materia de producción, industrialización y comercialización de alimentos y posee una gran diversidad, donde cada región presenta climas y tradiciones alimentarias propias, dando forma a una gran riqueza cultural agroalimentaria que configura la idiosincrasia de sus pobladores.
Existen innumerables oportunidades de agregado de valor en origen. En este sentido, los objetivos de las actividades apuntan a la articulación con todos los actores del entramado productivo. Se abordarán temáticas de agregado de valor, calidad, trazabilidad, envasado y logística, aportando devoluciones técnicas a emprendedores regionales a través de una clínica de alimentos. Es una acción que se suma a la dinámica constante que realizamos desde INTI, acompañando a las pymes en la producción de alimentos con una mirada integral, promoviendo la innovación en forma local, la producción sustentable, el fortalecimiento de las capacidades técnicas, que permitan a los alimentos argentinos responder a la demanda nacional y mundial con productos diferenciables, trazables y que cumplan con los estándares de calidad más exigentes.
En este marco, también presentaremos los avances que venimos concretando, junto al Instituto Nacional de Vitivinicultura y el Consejo Federal de Inversiones, en materia de sustentabilidad del sector vitivinícola nacional. Allí lanzaremos los talleres de capacitación para actores del sector en todo el país.
Un actor clave para concretar estas agendas son los gobiernos locales, por su conocimiento de las potencialidades productivas en sus territorios, para implementar soluciones novedosas en temas críticos (como el agua o los residuos), como articuladores para el aprovechamiento de las políticas de desarrollo tecnológico e innovación de organismos nacionales y provinciales; por las posibilidades de establecer acciones conjuntas y de cooperación con municipios y redes de ciudades a nivel latinoamericano e internacional. Por ello tendremos una sesión especial el viernes 1 de julio.
Todas las capacidades del instituto a nivel nacional están a disposición del entramado productivo regional de Cuyo, como lo venimos realizando con sus principales cadenas de valor (agroalimentaria, vitivinícola, olivícola, energías renovables, industria metalmecánica, del plástico, minera e hidrocarburos). Hoy contamos con 6 sedes en la región, con más de 120 profesionales, técnicos y auxiliares que aportan, como aliados, a productores y pymes para mejoras en su calidad, competitividad y procesos de innovación.
Desde nuestra gestión propiciamos “Un INTI Cerca y abierto”, en tres planos centrales. Cerca del rico y heterogéneo entramado productivo, de la agenda federal y de la sociedad.
El aniversario del INTI nos abre la posibilidad de consolidar acciones coordinadas en las principales líneas estratégicas y acompañar los desafíos de las nuevas agendas productivas en cada región del país.
*El autor es abogado y presidente del INTI
