Los modelos de aprendizaje difieren de acuerdo a la evolución de los diferentes ciclos de la vida, a diferencia de los enfoques pedagógicos formales de carácter obligatorio dirigidos a la educación escolar de los niños y adolescentes, en los adultos, la apropiación de saberes es voluntaria y reviste de un mayor compromiso. Se trata de un aprendizaje significativo basado en las experiencias de vida, que enfatiza en la socialización e interacción con los otros y contribuye al uso pragmático de herramientas destinadas a resolver las necesidades más sentidas. A esta disciplina, -la pedagogía de la vejez- se la denomina gerontología o geragoía, y es un vehículo esencial para mejorar la calidad de vida de los adultos mayores y un disparador de su superación personal. (1)
En las últimas décadas las transformaciones sociales y demográficas han impactado en el aumento de las expectativas de vida de la población, y en estos nuevos escenarios, el aprendizaje permanente emerge como un pilar fundamental para el desarrollo humano. De acuerdo al informe de Unesco, “Perspectivas de la población mundial 2019″, en 2050, una de cada seis personas en el mundo tendrá más de 65 años (16%), más que la proporción actual de una de cada 11 en este 2019 (9%). (2)
En este escenario, desde el año 2000 en nuestro país, los Sistemas Educativas se han ido transformando y existe un marcado interés en integrar a los adultos mayores a las instituciones educativas. A manera de ejemplo, se observan numerosas iniciativas de formación en la Universidad de Buenos Aires, la Universidad Tecnológica Nacional, la Universidad Nacional del Oeste, y la Universidad de la Pampa, entre otras.
¿Puede la Inteligencia Artificial contribuir a mejorar la educación para toda la vida?
La Inteligencia Artificial genera en la Educación, un cambio disruptivo. Frente a la heterogeneidad de los perfiles y diferentes ritmos de aprendizaje en el aula, estas tecnologías de avanzada facilitan la diferenciación y personalización de la enseñanza en cada estudiante. A manera de ejemplo, la plataforma experta AUTO-TUTOR desarrollada por el instituto de IA de la Universidad de Memphis (USA) es un modelo de educación para adultos. Ella, integra contenidos hechos a medida y permite desarrollar destrezas para la lectura de textos, promover ejercicios de asociación de palabras y, además, incentiva la alfabetización digital.
El aprendizaje de un segundo idioma, genera beneficios cognitivos de los adultos mayores. Recientes investigaciones, señalan notables mejoras en la fluidez verbal, la memoria, la lectura, y la concentración. Existen diferentes plataformas expertas de IA de reconocimiento de voz, sonidos y texto que utilizan algoritmos de reconocimiento del lenguaje. Un ejemplo de ello es ELSA (English Language Speech Assistant), una start up fundada en San Francisco (USA) la cual emula la pronunciación del inglés de un nativo y recomienda correcciones.
En este escenario, no cabe duda que las innovaciones tecnológicas son un camino de ida, el paradigma será entonces como lograr que la Inteligencia Artificial sea una aliada a favor de la educación continua a lo largo de toda la vida y la mejora de la existencia de las personas. El desafío está planteado.
(1) El concepto de la educación a lo largo de toda la vida, cobra notoriedad con el informe internacional de la Educación para el siglo XXI de la UNESCO, plasmado en el libro La Educación encierra un tesoro de Jaques DELORS. Se enfatiza además en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS4).
(2) Ver https://www.un.org/es/global-issues/ageing (consultado el 6/12/2023).
* Posgrado en Educación, especialista en Políticas Educativas (UTDT), líder en Educación IALAB (UBA).