América del Sur es una región alejada de los conflictos globales, como pueden ser los de Ucrania y Gaza, pero comienza a gestarse uno que puede tener influencia geopolítica. Se trata del que afecta a Venezuela y la República Cooperativa de Guyana por la región denominada Esequibo. Este país, históricamente conocido como la Guyana Inglesa, se independizó formalmente de Gran Bretaña en 1966. Tiene una amplia frontera con Venezuela, la que alcanza los 743 kilómetros. Se trata de un país cuya superficie es de 214.000 kilómetros cuadrados y una población de 815.000 habitantes. Su presidente es Mohamed Irfaan Ali, que está en el poder desde 2020. Dentro del territorio que ocupa este país, Venezuela reivindica la soberanía de la región de Esequibo, cuya superficie es de 159.000 kilómetros cuadrados y tiene una población de 128.000 habitantes. Es decir que Esequibo tiene una superficie que es más de dos tercios que la de Guyana en su totalidad y una población de aproximadamente la sexta parte. Hasta 1804 formó parte de la Venezuela que integraba el Imperio Español. Desde entonces fue incorporada a la colonia británica de Guyana. Durante la Presidencia de Hugo Chávez, éste renovó el reclamo de la soberanía sobre este territorio. Lo hizo con fines políticos para revitalizar el nacionalismo venezolano. Incluso llegó a incorporar una estrella más a la bandera de Venezuela, simbolizando a Esequibo como parte de su país federal. Cabe señalar que Venezuela tiene 30 millones de habitantes, una superficie de 916.000 kilómetros cuadrados y una correlación de fuerzas en el campo militar marcadamente superior que Guyana. Las Fuerzas Armadas de este país tienen un efectivo por cada setenta venezolanos (4.600 contra 300.000).
Enfrentando un proceso político complejo frente a la presidencial de 2024, a la que la oposición se presentaría unida, Maduro ha decidido revitalizar el reclamo, convocando a un referéndum para el 3 de diciembre. Esta decisión anula los llamados Acuerdos de Barbados, que establecían una suerte de statu quo respecto al conflicto. El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) venezolano, alineado con Maduro, ha desconocido los acuerdos y avalado el referéndum. Inicialmente la oposición no se opuso, pero ahora cuestiona que éste se superponga con la próxima elección. Pero Chávez, en el pasado lo revitalizó y contuvo al mismo tiempo. Es que la República Cooperativa de Guyana ha sido un aliado histórico de la Cuba castrista y fue un socio activo de La Habana y Caracas en manipular la Comunidad de Países Caribeños. Cabe señalar que Corina Machado, candidata de la oposición para 2024, encabezó hace una década distintas acciones sin éxito para forzar al chavismo a que no se olvidara del reclamo por Esequibo. Maduro ha dicho respecto a la actual actitud opositora: “La ultraderecha es antipatria, se le sale por los poros los vendepatrias. Empezaron una campaña contra el referéndum de Esequibo, que viola los Acuerdos de Barbados y ofende al pueblo”. Cabe señalar que el referéndum que tendrá lugar, las declaraciones de las partes, los movimientos de tropas y la construcción de una pista para aviones militares, han generado una escalada entre ambos gobiernos.
Pero este problema se potencia por el factor económico, dado que en el último lustro han sido halladas importantes reservas petrolíferas en el Mar Caribe, frente a la costa de Esequibo. El gobierno guyanés ha iniciado negociaciones con la empresa estadounidense Exxon Mobil para la explotación. El 7 de mayo esta empresa informó de un importante hallazgo a 193 kilómetros de la costa. Maduro llamó a consultas a su embajadora en Guyana y dictó el decreto 1860, por el cual creó la Comisión Presidencial para la Garantía de la Integridad Territorial y Asuntos Limítrofes. Guyana continuó la escalada con una presentación ante la Corte Internacional de Justicia para la validez del laudo de 1899, que le adjudica la soberanía sobre Esequibo, y que Maduro propone “desconocer por fraudulento” en el referéndum. Han tenido lugar incidentes con barcos petroleros en la zona marítima de explotación y el punto culminante tuvo lugar en septiembre, cuando el gobierno de Guyana autorizó a seis petroleras extranjeras la perforación en aguas reclamadas por Caracas. Es que el petróleo se encuentra en su subsuelo y en sus plataformas marítimas. A ello se agrega la riqueza en minerales, biodiversidad, bonos de carbono, pesca y turismo. Pero la explotación del petróleo puede convertir a Guyana en la nación del mundo con el mayor número de barriles producidos por habitante, dada su poca población. La diplomacia venezolana considera que los Estados Unidos se mueven hoy detrás del gobierno de Guyana y que han pasado a ocupar el lugar que hasta 1966 tenía Gran Bretaña.
Si este conflicto escala, se insertará de una u otra forma en los que enfrenta a Estados Unidos con China y Rusia en diversas partes del mundo. Cabe señalar que el régimen de Maduro es el principal aliado en América del Sur de Moscú en términos militares, al igual que lo es Nicaragua en América Central y Cuba en el Caribe. Asimismo, sus vinculaciones con China e Irán le han permitido eludir parcialmente las sanciones económicas aplicadas por Washington.
Esequibo es un conflicto que, aunque hoy no parezca relevante, lo será a partir del 3 de diciembre, cuando Venezuela realice el referéndum cuyo resultado justificaría la puesta en marcha de acciones para alcanzar la soberanía sobre este territorio.
* El autor es Director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría.