La definición, con el pie abierto y enviando el balón al segundo palo, lo subió inmediatamente al altar mayor de deidades paganas "mensanas". Patricio Cucchi hizo delirar a quienes presenciaron el clásico provincial frente a Independiente y ayer se animó a un mano a mano donde contó las sensaciones del día después.
-¿Adaptado a la provincia y sus costumbres?
-Si, y no solo yo, sino mi familia. Nos gusta mucho Mendoza; estamos muy bien.
-¿Y qué haces en tus ratos libres?
-Soy muy casero, no soy de salir mucho. Si he ido a Vallecitos, Penitentes, Villavicencio.... He recorrido y la verdad que el paisaje es inigualable, pero siempre prefiero quedarme en casa.
-¿Sos de mirás fútbol?
-Todo el tiempo. Cada partido que hay lo miro. Me gusta mirar Central y ahora Racing, que tiene al Chacho Coudet, un técnico que me gusta mucho.
-¿Por eso el festejo en el clásico (NdR: imitó a Coudet tras un gol a la Lepra rosarina)?
-(Risas) Si. Justo se dio que un hincha me escribió y me dijo que si hacía un gol lo festejara así.
-Vos decías que ídolos de Gimnasia son Víctor Legrotaglie y el Mago Oga, por caso, pero no podés negar que el hincha te reconoce dentro de esa galería...
-Me llena de orgullo. Es el reconocimiento al trabajo y al compromiso que tengo con el club. Desde que llegué traté de dar lo mejor y que el hincha lo reconozca es lo que voy a llevar para siempre.
-Te pasan cosas locas con los hinchas; te hacen regalos, por ejemplo...
-No solo a mi, sino a mi hija Sienna también. Antes de los viajes me regalan cajas de chocolates o helados. Y me han regalado incluso ropa para mi hija. ¡Son increíbles!
-¿Imaginaste que ibas a hacer un gol en la previa del clásico?
-Lo hablé con Pablo (Cortizo) en la semana; cuando siento que voy a hacer un gol se lo cuento. Por suerte se me dio en los tres partidos de local. Fallé en Mitre, donde le dije que iba a hacer un gol y creo que ni pude patear al arco (risas).
-¿Este rol goleador es nuevo o es una de tus características?
-Soy acompañante de centrodelantero y soy de tener varias chances por partido. El año pasado me tocó jugar por afuera y pude llegar varias veces al gol; es una característica que siento que tengo.
-¿Cuándo pisaste el área ya tenías decidido patear?
-En el momento que me la da el Negro (Bazán) ya sabía que iba a patear. De hecho, ahora que lo miro por tele veo que Nachito Morales llega por el medio. En ese momento ni lo vi; tenía decidido patear al segundo palo y por suerte salió.
-Dijiste que no fue el más lindo, pero si el más importante...
- ¡Sin dudas es el más importante de mi carrera!
-¿Cómo fue el festejo post clásico?
-Me fui a casa con mi mujer, mi hija, mi hermana y mi cuñado. La verdad es que lo disfruté un montón. Cuando te relajas empezás a ver los comentarios de los hinchas y trato de disfrutar esas cosas.
-El domingo, sobre todo en el primer tiempo, apareció el "toque Lobo, toque"...
-Jugamos un gran primer tiempo, moviendo la pelota de lado a lado. Independiente tiró muchos pelotazos y eso nos permitió tener el control del balón.
-¿En que momento de tu carrera estás?
-Me siento muy bien, en un gran momento. Desde que llegué me pude adaptar, me tocaron dos o tres procesos muy buenos, con grupos bárbaros. Si no hubiera tenido los compañeros que tuve tampoco me hubiera sido tan fácil adaptarme. Eso habla de los planteles que armó Gimnasia.
-En este arranque en la B Nacional no se nota que son nuevos; ¿eso es una virtud?
-Es que hay una base del plantel que ganó el ascenso y los chicos que se sumaron son muy buenos. Era cuestión de adaptarnos como grupo, de conocernos y sabíamos que si eso pasaba no íbamos a tener sobresaltos. Podés perder, claro, porque el rival también juega, pero si estamos bien, y haciéndonos fuertes de local, podemos dar pelea.
-¿Cuál crees que es la clave de este equipo y cuál el aspecto que deben corregir?
-Sabemos que cuando no podemos jugar tenemos que correr y meter todos. Podés tener buen pie, pero cuando no tenés sacrificio, se hace todo cuesta arriba. Y en cuanto a lo que tenemos que corregir, creo que con el clásico a nuestro favor, con Independiente volcado en ataque y con los espacios para contragolpear, no supimos manejar la pelota.
-¿Cómo es el Chaucha como DT?
-No lo conocía, aunque si tenía referencias. Es un técnico de mucha trayectoria; exige un montón y hace mucho hincapié en la presión. Cuando tenemos la pelota, pretende que la cuidemos y la hagamos correr todo el tiempo que haga falta hasta encontrar los espacios para lastimar.