La pasión todo lo vence, no hay barreras que se interpongan cuando uno ama lo que hace. Pepe es uno de esos hombres que por más piedras que se interpongan, le encontrará la vuelta.
Sin importar las limitaciones que la cuarentena ha producido en el desarrollo cultural, él se sumó a la lista de artistas que sin dejar sus profesiones al azar, tomaron cartas en el asunto y hoy puede llegar a muchas más personas con sus diversos personajes.
Desde "Marica" y "Juana la Loca" hasta "Dos Tronos, Dos Reinas", Pepe trasmite cada viernes una de sus obras a través de PlateaLive, una nueva plataforma creada por PlateaNet. A las 21 cada semana tienen una cita con él y sus múltiples personajes para disfrutar del teatro incluso a la distancia.
Dando vida a cada uno de sus personajes, desarrolla monólogos, encarna una obra completa y ofrece espectáculos para disfrutar en familia. Sumado a todo esto, por su cuenta de Instagram (@pcibriancampoy) comparte sus clases y segmentos de Jacinta, una portera muy bruta y bárbara de su obra "En el nombre del padre".
Sin parar y ya con planes para el próximo año, el director está armando el casting de su nueva obra "Infierno Blanco", que planea estrenar en abril del 2021 en el Teatro IFT y algo fundamental para remarcar, es que será a la gorra.
"Infierno Blanco es un musical con música de Ariel Dansker, es la relación entre el mayor narcotraficante que te puedas imaginar y un joven científico, ambos viven en París. Es una crítica brutal a la droga y una esperanza de lo que puede lograr gracias y con el amor", contó el actor a Los Andes.
Con las audiciones realizadas a través de Zoom, Pepe está en busca de los actores que darán vida a esta nueva propuesta musical. "Hay gente muy talentosa, Luis también toma las pruebas. Hay gente de Rosario, Bahía Blanca, Tucumán, están tomando audiciones desde sus ciudades y una vez que esté habilitado vendrán a tomar las pruebas en persona. Hasta que no los vea no puedo decidir".
Sumando más actividades a su vida, comenzó a dar clases de teatro particulares por internet y esto ha resultado ser toda una novedad para él. "Las clases maravillosas, hace una semana una amiga me dijo '¿por qué no das clases particulares?', al principio dije que no pero después pensé que si mi terapeuta es particular y eso se puede hacer así, ¿por qué yo no?", contó Cibrián. "No puedo explicar la cantidad de gente que hay, me divierto y es muy lindo. Hay personas de Tierra del Fuego, hay una chica de Canadá tomando clases. Es maravilloso porque nos acerca".
La situación de los artistas
La realidad es que a diario leemos noticias de los diferentes trabajadores del ámbito artístico que temen por su situación. Es difícil tanto para las personas acceder como para ellos lograr hacer rentable su trabajo en los tiempos de aislamiento.
- ¿Te parece que son correctas las medidas tomadas por el presidente?
- Yo creo profundamente que las medidas han sido correctas. Estoy de acuerdo pero hay que pensar otras para ver cómo resolver la cuestión económica. Creo que vamos a salir de esto como un mundo fracturado, como si saliéramos de una guerra. Y a nosotros no nos va a prestar nadie, vamos a ser los responsables de todo lo que va a pasar.
- ¿Cómo afrontan la situación los artistas?
- Los artistas no están amparados para nada, la secretaria general dijo que los artistas no somos imprescindibles y esa es una opinión de ella. No somos quizás imprescindibles para el funcionamiento de un país pero si para el funcionamiento de nuestro estómago, nosotros somos tan imprescindibles como el chofer de un taxi, un obrero que hace la changa todos los días. Ya sé que quizás no lo somos como un médico, la gente de salud, las fuerzas de seguridad pero nosotros también somos necesarios.
Lo que enfrenta el actor es que tiene suerte si tiene una propuesta por internet y es un dinero que si se da bien ayuda, pero la mayoría no tiene esa posibilidad.
Yo tengo 50 obras mías que me permiten hacer una por semana sin tener que pagar derechos. Es terrible para todos los rubros que 'no son imprescindibles'.
Su casa, su santuario
Sus días se amoldan a una rutina organizada que incluye hacer bicicleta, dar clases particulares, reportajes, dar vida a Jacinta, tomar clases de teatro, realizar pruebas para su obra "Infierno Blanco", entre otras cosas.
El aislamiento, lejos de deprimirlo, le dio a Pepe una nueva forma de afrontar los desafíos y reconvirtiéndose para lograr cumplir con sus tareas.
Encuentra poco tiempo para desanimarse y esa es la clave de su bienestar. En la comodidad de su casa y con buena compañía, él decide seguir adelante.
"Soy un hombre muy privilegiado, tengo una casa muy bella en Pilar. Tengo un patio que es una reserva ecológica que he armado durante 20 años, es muy bella y muy impactante. Vivo con un amigo que vino a hacer la cuarentena, con Luis mi hijo, con Dalma, mi tía que tiene 90 años y dos mujeres que la cuidan y hacen cuarentena en casa. Además mis cuatro perros que son mi familia, así que estoy muy acompañado. Lo vivo desde un lugar diferente".
- Fuera de la rutina, ¿qué pudiste hacer?
- Lo que puedo hacer es encontrarme conmigo mismo a través de estar, no necesitar el afuera, estar metido en mí y mi gente. Darme cuenta que puedo subsistir en reclusión, puedo ser un monje tibetano.
- ¿Cuál ha sido tu objeto fetiche de la cuarentena?
- Seguramente la computadora. Mi cuarto tiene 120 metros, mi cuarto es mi casa. Más allá de la casa que yo casi no voy, mi cuarto es mi espacio. Tengo mi escritorio, mi cama con los perros, mi baño, todo lo tengo en este espacio. Salgo al parque directo, entonces la computadora me acompaña mucho en este momento.
La historia con Luis, su hijo mendocino
Una noticia que resonó en nuestra provincia fue la adopción de su hijo mendocino. Algo que siempre cuenta Pepe es su deseo de ser padre. Por 15 años trató de adoptar junto a su ex pareja y la suerte no tiró para su lado. ¿Dónde encontró la luz? En Luis.
"Todo fue gracias a su provincia. Me había separado y estaba muy angustiado en este caserón inmenso, necesitaba que se quedara todos los días un amigo o amiga conmigo
porque estaba muy angustiado. Fui a dar un seminario a Mendoza con muchas personas muy talentosas y había un joven llamado Luis."
Desde el primer momento, algo se movió dentro de él que le indicaba una señal, algo más había. "Me impactó su buena voluntad durante el seminario, siempre colaborando y de buen humor.
Lo invité a él y otro chico a mi seminario en Villa Mercedes. Como soy muy lanzado en la vida pero soy muy perceptivo, percibí que este chico era muy buena persona pero mis amigos decían que estaba loco y no sabía quién era y les dije yo sí sé quién es", contaba Pepe.
"Entonces lo senté y le dije 'Mira Luis me acabo de separar y blablablá. Vos sabes que yo soy gay, yo sé que vos no sos gay lo cual esto es fundamental que lo sepamos para poner en claro que mi único fin es el que te voy a decir y no me mueve otra cosa porque no sería tan pesado de llevarme a alguien a Buenos Aires para eso.
Te propongo que pases siete días en casa, que nos conozcamos y si vos te sentís a gusto, porque él vivía en Mendoza con su madre y su pasión es el teatro, pongo todas las plataformas a tu disposición: canto, danza, teatro. A cambio necesito tu compañía, que estés, me acompañes, me ayudes".
Así fue, comenzó pasando siete días con Luis y se dio cuenta de que era la compañía que había esperado por mucho tiempo.
"Es un hijo absoluto, toda la vida quise tener hijos, quise adoptar durante 15 años cuatro hermanitos y nunca me los dieron; de repente aparece este ser mágico y bello, estoy seguro de que me lo mandaron mis padres para decirme 'acá tenes un hijo ya crecido', lo cual es una ventaja."
Se puede escuchar en su voz, realmente pleno de felicidad encontró lo que toda la vida deseó. "Cuando uno adopta en afecto a alguien, eso es indescriptible la alegría que me causa.
Tener a alguien que me cuida y que lo cuido, que me causa una ternura enorme, lo veo feliz y trato de que así sea y así él conmigo. Mendoza es una ciudad que siempre me ha dado cosas muy lindas".