Cada vez se conocen más en Mendoza los casos de “chacales” detenidos por reiterados abusos sexuales en su círculo familiar. Así como la semana pasada se informaba sobre la captura de un hombre acusado de embarazar a su hijastra de 12 años, ahora otra investigación similar deriva en un arresto en Guaymallén.
El sospechoso de esta nueva causa cayó en las últimas horas del miércoles y estaba denunciado desde hacía algunas semanas por su hija adoptiva, una mujer de 23 años.
Adopción, abandono, violaciones y embarazos
La triste historia de la víctima se remonta a cuando era una niña y fue adoptada con 9 años por una pareja. Muy poco tiempo había pasado de esta vida familiar, cuando empezó a ser abusada por el padrastro.
Los primeros vejámenes fueron tocamientos y luego comenzaron los abusos con acceso carnal. Como consecuencia de estos ataques, a los 15 años quedó embarazada por primera vez.
A esta altura su madrastra había hecho abandono de hogar y la por entonces adolescente sólo vivía con el acusado. Los hechos continuaron y dos años después tuvo a su segundo hijo, también producto de una violación.
Hoy la víctima es madre de dos pequeños, de 7 y 5 años, y semanas atrás decidió denunciar al hombre con el que vivía hasta la actualidad. En su presentación en la Justicia, la joven detalló todos sus padecimientos y agregó que este sujeto la amenazaba de muerte para que no contara nada.
Con este relato comenzó a trabajar la fiscalía de Delitos contra la Integridad Sexual, que ya tenía identificado al sospechoso. Sin embargo, éste tomó conocimiento de la denuncia y dejó su casa de Las Heras, llevándose por la fuerza a su hija y a los menores.
A través de diversas medidas los investigadores llegaron al dato de la nueva residencia que tenían y así allanaron una vivienda del barrio Belgrano II de Guaymallén el miércoles.
La Policía detuvo al hombre de 57 años, mientras que la denunciante y sus hijos fueron puestos bajo la guarda de los Equipos Técnicos Interdisciplinarios del Gobierno.
El detenido quedó a disposición de la fiscalía y en las próximas horas sería imputado por abuso sexual agravado por acceso carnal y por el aprovechamiento de la convivencia preexistente con una menor de edad. Fuentes vinculadas a la pesquisa indicaron que el sindicado tiene antecedentes por otros delitos.
En la continuidad de la causa se espera el resultado de pruebas importantes, como será la ampliación de las pericias psicológicas y psiquiátricas de la joven y un cotejo de ADN entre el presunto “chacal” y los niños para confirmar su paternidad.
