Reconoció que mató a un jubilado para robarle la bicicleta y zafó de la prisión perpetua. Ese fue el acuerdo entre Luis Miguel Alcaide (27) y la fiscalía, por el crimen a golpes de Luis Segundo Villalba (63) el año pasado en Las Heras. El acusado fue condenado a 25 años de cárcel en un juicio abreviado.
Para ambas partes fue “negocio”. El fiscal Gustavo Pirrello cerró en poco más de 8 meses una investigación con una pena alta, mientras que el sospechoso evitó la sentencia máxima que podía recibir frente a un jurado popular.
Es que Alcaide estaba imputado por homicidio criminis causa -matar para ocultar otro delito-, que únicamente contempla la perpetua. A través del abreviado, la calificación se modificó a homicidio en ocasión de robo -el objetivo era el asalto y no hubo intención de asesinar-, recibiendo la condena más elevada prevista para este tipo de hechos.
El arreglo judicial entre el fiscal y el abogado defensor fue avalado por el juez Gabriel Bragagnolo en la mañana de ayer, por videoconferencia.
Sin beneficios
Alcaide deberá cumplir los 25 años sin ninguna morigeración, ya que cuenta con antecedentes penales. Incluso, en 2018 había salido de la cárcel luego de cumplir penas por otros hechos.
En 2014 fue condenado por un robo simple, mientras que dos años después la Justicia lo encontró culpable por un robo agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa.
Fue a votar, le robaron la bici y lo mataron
Villalba era un jubilado domiciliado en Las Heras, que se ganaba unos pesos haciendo trabajos de jardinería. En la mañana del domingo 29 de septiembre pasado se levantó muy temprano para ir votar, ya que ese día se elegía gobernador en Mendoza.
Alrededor de las 7.30 iba en su bicicleta por la lateral Oeste del Acceso Norte y, al llegar al cruce con Juan José Paso, fue abordado por un ladrón que lo redujo, lo golpeó y le sacó el rodado.
Vecinos de la zona encontraron a la víctima tendida y sin reacción. El hombre fue internado y a las pocas horas murió como consecuencias de golpes en la cabeza, traumatismos y una fractura de cráneo. Sus familiares declararon que había salido en bicicleta, y al notar ese faltante, se empezó a investigar un caso de inseguridad.
Las cámaras de seguridad corroboraron esto y días después la Policía vio a una mujer circulando en la bicicleta de Villalba por el asentamiento Junín, cercano a la escena del crimen.
Esta persona aseguró que su hijo se la había comprado a un muchacho y aportó la identidad. Los efectivos fueron a buscarlo y lo encontraron en esa misma barriada.
El primer detenido fue el hijo de la novia de Alcaide, quien estuvo una semana preso hasta que detuvieron a su padrastro. Las pruebas lo fueron complicando durante la pesquisa, se vio acorralado y ayer decidió confesar su autoría para ser condenado.
