Cada vez se complica más la situación de Franco Ábrego, el jovende 26 años conocido en el ambiente delictivo como “Cara cortada”. Durante una audiencia que se realizó esta mañana en el Polo Judicial, una jueza le dictó la prisión preventiva por el brutal crimen de Nahuel Ampuero (25) quien fue hallado calcinado y descuartizado en el Oeste de Godoy Cruz. Por el caso también está acusada la madre del ex soldadito de “La Yaqui”, quien fue capturada el último lunes.
El pasado 6 de marzo, el escalofriante hallazgo de un brazo en el asentamiento La Quebrada, en Godoy Cruz, abrió una intensa investigación. Se trataba de una parte del cuerpo de Ampuero, quien llevaba algunos días desaparecido. Días después, ”Cara cortada” se entregó a la Policía y desde entonces la fiscal de Homicidios Andrea Lazo ha recabado pruebas que apuntan a Ábrego y a su madre Norma Díaz, como los homicidas.
Durante la mañana del miércoles, una de las salas del Polo Judicial fue testigo de las pruebas que presentó la fiscal Lazo frente a la jueza Mirna Montaldi, del Juzgado Penal Colegiado 1, informaron desde el Ministerio Público Fiscal.
La fiscalía de Homicidios sostiene que Ábrego asesinó, calcinó, descuartizó y enterró las partes de Ampuero en cal para deshacerse de cualquier rastro. Tras escuchar y analizar lo expuesto, la magistrada dio lugar al pedido de Lazo y dictó la prisión preventiva a “Cara cortada”, imputado por homicidio agravado por el uso de arma de fuego y por ensañamiento.
Mientras, el acusado escuchaba desde la sala de videoconferencias del penal San Felipe. Con la decisión de la jueza, Ábrego deberá enfrentar a un jurado popular arriesgando una única condena de prisión perpetua, a menos que busque acceder a un juicio abreviado.
Pruebas del horror
Nahuel Ampuero era padre de una nena y su pareja estaba embarazada de cinco meses. Durante la tarde del 26 de febrero, y tras pasar el domingo con su madre, el joven se fue sin especificar su destino. No volvieron a saber de él y su familia denunció su desaparición. La búsqueda comenzó el 3 de marzo.
Tres días más tarde, investigadores allanaron la casa donde vivía “Cara cortada” con su madre en el Oeste de Godoy Cruz, luego de que testigos señalaran que habían visto juntos a la víctima y al conocido delincuente. Madre e hijo habían escapado del domicilio. Pero un brazo con un tatuaje particular, más una expeditiva analítica del Cuerpo Médico Forense permitieron determinar que se trataba del joven padre.
Ese mismo día, “Cara cortada” se entregó, pero negó ser el autor del crimen. Sin embargo, los rastrillajes continuaron y, de a poco, diferentes partes del cadáver fueron apareciendo enterradas con cal en los alrededores de la vivienda de Ábrego y su madre.
Cuando los sabuesos entrevistaron a los vecinos de la zona, algunos se animaron a señalar que habían visto llegar a Ampuero en una moto de baja cilindrada y horas más tarde, una columna de humo atravesaba el cielo desde la vivienda del imputado. También hubo quienes atestiguaron que se habían escuchado disparos y la voz de Norma Díaz a los gritos: “Dejá, dejá, vamos”, según especificó una fuente allegada a la causa a Los Andes.
Para la fiscal Lazo, el móvil del crimen no está del todo claro, a pesar de que una de las hipótesis más fuertes que teje con los investigadores es que está vinculado a la venta de drogas. “Cara cortada”, quien supo ser el brazo armado de “La Yaqui”, estaba vinculado al narcotráfico y al parecer, Ampuero había empezado a trabajar con él en la venta al menudeo.
“Partícipe secundaria”
El pasado 11 de abril, Díaz fue detenida por policías de la División Homicidios en Tupungato mientras caminaba por el callejón Arroyo La Jarilla. Tras ser trasladada a Ciudad, la representante del Ministerio Público Fiscal la imputó como partícipe secundaria de homicidio agravado por uso de arma y por ensañamiento.
Encerrada tras los muros en el penal de mujeres, la madre de “Cara cortada” quedará a la espera de la audiencia para determinar, o no, su prisión preventiva al igual que su hijo.