La Justicia ordenó una nueva autopsia sobre el cuerpo de la joven modelo brasileña Emmily Rodrigues, fallecida el pasado 30 de marzo tras caer de la ventana del departamento del empresario Francisco Sáenz Valiente, en el barrio porteño de Retiro.
La nueva revisión, programada para el 16 de enero a las 10:30 horas en la Morgue Judicial, fue solicitada por el abogado de la familia, José Vera, y ordenada por el fiscal Santiago Vismara.
La solicitud se basa en el informe del médico perito de parte, que señala lesiones en el cuerpo de Emmily que no serían compatibles con una caída libre. La primera autopsia reveló la presencia de alcohol, marihuana, cocaína, MDMA y Ketamina en el organismo de la modelo. Además, una lesión en la zona del pecho y abdomen, identificada como la número 18, suscitó sospechas de resistencia a la caída o incluso de posible empuje.
La nueva autopsia buscará arrojar luz sobre este aspecto específico, evaluando si la lesión indicativa de posible arrastre respalda la teoría de que la joven pudo ser empujada. El informe médico previo determinó que Emmily murió por politraumatismos varios y hemorragias internas y externas.
Sáenz Valiente primero estuvo detenido y acusado de homicidio simple y luego la Fiscalía cambió la acusación a abandono seguido de muerte, pero la Cámara del Crimen redujo notablemente la imputación al calificarlo de homicidio culposo.
Asimismo, también está procesado por suministro gratuito de estupefacientes, en concurso ideal con facilitación de un lugar para su consumo, a raíz de haber aportado la droga que se consumió esa madrugada. Según la defensa, la droga fue llevada al lugar por la joven modelo y el grupo de chicas con el que llegó.
EL CASO DE EMMILY RODRÍGUEZ
El empresario cuando pactó aquella madrugada pasadas apenas las 24 horas la llegada de las cuatro chicas al departamento, entre ellas Emmily, quien llegó junto con otras dos y se encontró que en departamento de Libertad al 1500 ya estaba Sáenz Valiente con otra mujer.
Luego se supo que dos se fueron durante la madrugada y quedó Emmily junto con “Juli” y el empresario. Estos dos aseguran que aquella había consumido drogas, que le agarró una suerte de brote psicótico y se tiró del balcón.
Sobre el suministro de drogas, la Cámara valoró que ni bien pactó el encuentro en su departamento, Sáenz Valiente chateó con una persona de quien se sospecha es una suerte de “dealer” a quien le solicitó “dos blancos y un tus” en referencia a las drogas.
“El imputado facilitó gratuitamente tales estupefacientes, al ponerlos a disposición de sus invitadas y su domicilio para que pudieran consumirlos. Es irrelevante cómo y quién organizó el encuentro; en lo que aquí interesa, fue él quien proporcionó las sustancias como también el lugar para su consumo”, acotó el Tribunal al evaluar el caso.
Los jueces incluso valoraron los llamados que el empresario hizo a las 9:13 al 911 luego que a las 9 ella tuviese -según la defensa- el brote psicótico, donde tanto él como la modelo de fondo piden la presencia policial. Luego hay otro llamado un minuto más tarde donde piden nuevamente la concurrencia de la Policía. .
Por ello entienden que “llevó adelante situaciones de auxilio” cuando la situación se puso “inmanejable” pero sí que por las drogas que él suministró, Emmily “tuvo una situación de descompensación psiquiátrica que determinó que cayera de una de las ventanas del departamento”.
“Creó una situación de peligro concreto”, concluyó por mayoría el Tribunal y descartó la acusación de homicidio de la querella. .
“Al haber puesto tales estupefacientes a disposición de sus invitadas, Sáenz Valiente creó un riesgo jurídicamente desaprobado, con incidencia directa en el resultado. Las partes coinciden en que Emmily atravesó un ´brote psiquiátrico´ agudo a causa del consumo de diversas sustancias -alcohol, tusi y cocaína-. La propia defensa se encargó de presentar informes de expertos en Toxicología donde se advierte sobre las posibles consecuencias de ´la cocaína rosa´”, señalaron.