Una audiencia de impugnación de pena se llevó a cabo este viernes en La Pampa por el crimen del niño Lucio Dupuy, asesinado en 2021 en esa provincia. En dicho procedimiento, dos fiscales solicitaron que la madre de la víctima, ya sentenciada a prisión perpetua por homicidio, también sea condenada por abuso sexual, al igual que su pareja; mientras que la querella pidió que a ambas mujeres se les sume el agravante de “odio de género”.
Fuentes judiciales comunicaron a Télam que la diligencia se realizó ante el Tribunal de Impugnación Penal (TIP) de Santa Rosa, donde estuvieron presentes las representantes del Ministerio Público Fiscal, el abogado querellante y las defensoras oficiales Magdalena Espósito Valenti, madre de Lucio, y su pareja, Abigail Páez.
Cabe mencionar que en febrero pasado, la madre de la víctima fue condenada a prisión perpetua por “homicidio triplemente calificado por el vínculo, alevosía y ensañamiento”; y Páez a la misma pena, pero por “homicidio doblemente calificado por alevosía y ensañamiento”, en concurso real con “abuso sexual con acceso carnal”.
Aun así, este fallo de primera instancia fue impugnado por las partes y en la audiencia de este viernes las fiscales María Mónica Rivero y Verónica Ferrero solicitaron que Espósito Valenti también sea declarada culpable del abuso sexual, al igual que su pareja.
En ese marco, la fiscal Rivero consideró que el tribunal de juicio valoró erróneamente las pruebas en el contexto en que se produjo el homicidio y dijo que, si en esa instancia se dio por acreditado que Lucio sufrió lesiones por los abusos sexuales padecidos en el ámbito intrafamiliar, “sería ilógico pensar” que la madre desconocía esos hechos.
En su turno, el querellante particular José Mario Aguerrido, quien representa al padre de Lucio, Christian Dupuy; acompañó ese pedido y también solicitó que a ambas mujeres se les sume el agravante de “odio de género”. Además, Aguerrido dijo que ese odio al género masculino fue el motivo para matar a Lucio, habló de una “animadversión patológica” y remarcó que “si una hacía, la otra permitía”.
Sin embargo, estos pedidos de las partes acusadoras ya habían sido planteados en el juicio oral, pero fueron desestimados por el tribunal de juicio.
LAS DEFENSORAS DENUNCIARON UNA “MEDIATIZACIÓN EL CASO”
Mientras tanto, las defensoras oficiales María Silvina Blanco Gómez y Alejandra Moyano González, en representación de Páez y Espósito Valenti, respectivamente, pidieron al TIP, integrado por el juez Mauricio Piombi y la jueza María Eugenia Schijvarger, “la impugnación de la pena sea en un juicio justo” y denunciaron una “mediatización del caso”.
Por su parte, Blanco Gómez pidió que rechace los recursos de la fiscalía y de la querella porque “ninguna de esas dos partes expresó cuál es el perjuicio que les causó el fallo”; y Moyano agregó que “no hay pruebas” para condenar a Espósito Valenti por abuso sexual, por lo que solicitó que se mantenga la absolución en ese punto.
Además, ambas pidieron que a Páez se le revoque la condena a prisión perpetua y la autoría de abuso sexual, al tiempo que consideraron que las agravantes del homicidio “no fueron debidamente fundadas”. Por ello, las defensoras requirieron que esta mujer sea condenada por homicidio preterintencional.
Esto último hace referencia a que supuestamente no tuvo intención de matar, subsidiariamente por homicidio simple, cuya pena máxima de 25 años. En el caso de Espósito Valenti pidieron la absolución al sostener que la que siempre golpeaba a Lucio era Páez y que lo hacía cuando la madre no estaba presente o que eventualmente le fijen una pena por homicidio preterintencional.
Ante este planteo, la fiscal Ferrero aseguró que “no existió un homicidio preterintencional porque las acusadas golpearon a Lucio de manera brutal hasta provocarle la muerte” y que “utilizaron un medio razonable para matarlo”, por lo que existió “dolo”.
LAS CONDENADAS: VÍA ZOOM
Por su parte, las dos condenadas siguieron la audiencia, que se llevó a cabo en la Sala 7 del Centro Judicial de la capital pampeana, vía Zoom desde el Complejo Penitenciario 1 de San Luis, donde están presas. Ambas mujeres fueron interrogadas al final de la audiencia sobre cuestiones personales, tras lo cual, el TIP dio por concluida la diligencia y ahora se espera que fije una nueva fecha para dar a conocer su fallo.
Lucio (5) fue asesinado el 26 de noviembre de 2021 en la casa de la calle Allan Kardec al 2300 de Santa Rosa, donde vivía con su madre y la pareja de esta. La Justicia pudo establecer que a las 17.32 se lo vio a Lucio vivo por última vez y que entre esa hora y las 19.40, cuando ambas imputadas salieron solas del departamento, Lucio fue golpeado brutalmente.
A su vez, Páez llevó en moto a su novia al trabajo de moza en el restaurante de un hotel de la capital pampeana y volvió sola a las 20.49, cuando intentó reanimar al niño y lo metió bajó la ducha. A las 21.30, Páez salió con Lucio en brazos para el centro asistencial del barrio Río Atuel, anexo al departamento, pero estaba cerrado.
En ese momento, el niño fue asistido por vecinos y finalmente lo trasladaron al Hospital Evita, donde a las 21.45 se constató que ya estaba muerto. Según determinó el tribunal de juicio, las dos mujeres participaron de la golpiza mortal y el nene recibió puñetazos, patadas y palazos, además de un pisotón en la espalda por parte de Páez (que se pudo determinar por la marca que dejó su zapatilla), el cual le provocó lesiones internas.