El apellido Aguilera primero ganó relevancia en el mundo del hampa mendocino tras su fuerte vinculación con el narcotráfico y porque clan supo hegemonizar el liderazgo de la barra brava del club Godoy Cruz Antonio Tomba.
Hoy miércoles 11 de septiembre, el informe policial volvió a reflejar trágicas novedades que repiten zona y apellido: Carlos Manuel Herrera Aguilera, sobrino del ex jefe de la barra de Godoy Cruz, Daniel “El Rengo” Aguilera (hoy preso por narcotráfico), fue asesinado de un tiro en la cara en medio de un feroz tiroteo en la manzana J del barrio godoicruceño La Gloria, el centro de operaciones del temido clan familiar.
El Clan Aguilera, el narcotráfico, el Tomba y una vida de violencia
En los años 70, obreros y trabajadores rurales tomaron parte de la finca La Gloria, en Godoy Cruz, y formaron la villa inestable “El Gran Chaparral”, nombre que hacía referencia a una serie de vaqueros y a las chapas que se usaban en las casas.
Antes de que empezara el Mundial 78, los militares erradicaron algunas villas ubicadas en las sedes del evento, entre ellas “El Gran Chaparral” que fue transformada por obra del I.P.V. en el barrio La Gloria: 1.458 viviendas distribuidas en trece manzanas ubicadas al este del Acceso Sur, entre Rawson, Terrada, y Carrodilla.
Los militares utilizaron un método extraño para ubicar a los habitantes: según sus antecedentes policiales les asignaron distintas manzanas. En esa llamativa distribución a la familia Aguilera le tocó en suerte la manzana B, que se transformaría con el tiempo en una suerte de bunker del Clan Aguilera. Allí nacería, el 24 de octubre de 1981, Daniel Orlando Aguilera Maldonado, hijo de Carlos y Gladys.
Veinte años después, Daniel se ganaría el apodo de “El Rengo” y se transformaría en el vecino más famoso. Mucho más famoso que el recordado Padre Jorge Contreras - quien dirigió la parroquia Virgen Peregrina en la década del 90- y más famoso aún que su archienemigo y vecino: el narcotraficante Marcelo “El Gato” Araya.
Aguilera, mostró alta exposición social: cerca de 2004 comenzó a liderar la hinchada de Godoy Cruz Antonio Tomba y, desde ese, momento empezó a aparecer en las noticias deportivas y en crónicas policiales, a partes iguales.
La primera causa que tuvo Aguilera fue por tenencia de municiones de arma de guerra en 2004. En ese mismo año tiene dos causas por robo agravado y otra por encubrimiento. El folclore barrial indica que ya en 2001, cuando se accidentó, “andaba metiendo caño”.
Por qué le dicen “Rengo” a Daniel Aguilera
“Iban en una Honda XR tratando de llegar al barrio La Gloria y en Sarmiento y 9 de julio, en el límite entre Maipú y Godoy Cruz, el conductor perdió el control de moto, cayeron y ahí perdió una pierna y se ganó el sobrenombre”, cuenta una de las fuentes consultadas.
Cómo llegaron los Aguilera a liderar la barra brava del Tomba
Algunos dicen que Aguilera tuvo algo que ver con la muerte de Víctor “Sandalio” Arabel, asesinado en la puerta del Gambarte, en abril de 2002, cuando El Tomba jugaba con Huracán de Tres Arroyos. Pareció un crimen por encargo, de película: un auto blanco costeando el zanjón, un tirador que se baja y le da un tiro en la frente al “Sandalio”. Para la policía fue un ajuste de cuentas pero con el tiempo, el comentario entre los hinchas señaló al Clan Aguilera.
Siendo un adolescente, Aguilera formaba parte de los chicos de la Gloria que iban a ver al Tomba. Los de la Vieja Guardia los conocían porque, él los trataba de “don”, por ser mayores.
Eran otros tiempos: Godoy Cruz militaba en la B, no había un solo líder en la hinchada sino un grupo de aficionados que si bien eran “pesados”, no estaban relacionados con el delito. Eran “El Miguelito”, “El Tatú”, “El Riojano”, “El Corte” y “El Tomba” y “El Cachorro”. Fanáticos del Tomba, venían de la zona de la plaza Godoy Cruz, de la Cuarta, de Las Heras, e ingresan al Gambarte con entradas de “favor”.
“En ese momento se produjo un cambio generacional en las hinchadas de todo el país que coincide con el menemismo. Ahí algunas barras ven que se puede hacer grandes negocios con el futbol. Godoy Cruz, no escapó a ese modelo”, cuenta un hincha de la primera hora.
Ese modelo incluía: venta de entradas, venta de droga dentro y fuera de la cancha, dinero de los estacionamientos, de los carritos de comidas, de los micros para viajar, de las banderas. Eso, y también contactos políticos y con la policía. Y en el caso de Godoy Cruz el modelo se terminó de instaurar en 2006, cuando asciende a la primera división.
De hecho el primer partido de Godoy Cruz en primera división, haciendo de local en el Malvinas Argentinas, el partido fue suspendido por fuertes incidentes alentados por la barra tras negociaciones frustradas con la dirigencia por micros para viajar y por “contribuciones” de los jugadores.
¿Cómo llego a comandar a los barras tombinos?
Un año antes de ascender, José Mansur, integrante de la gerenciadora Acción Deportiva, sufrió un asalto cuando iba hacia su casa llevando la recaudación - entre 15 mil y 28 mil pesos- del partido con Huracán de Parque Patricios.
Algunos dirigentes apuntaron a la Vieja Guardia y dejaron de darle entradas a “El Cachorro”, el referente del barrio la Gloria que después caería preso. Aguilera fue el reemplazante.
Al poco tiempo –primero en el Gambarte y luego en el Islas Malvinas- ya se podía ver la típica postal cuando uno iba a ser al Tomba: Aguilera -a veces con muleta, a veces con su pierna ortopédica- ingresando a popular seguido de cuatro o cinco guardaespaldas, entre ellos Diego, su hermano, y rodeado de unos 60 hinchas del barrio La Gloria, para ubicarse en el blanco que naturalmente se les reservaba.
Pero detrás de esa postal podían leerse mensajes como este que le enviaba, por teléfono un funcionario a un comisario en 2006: “¿Cómo no vas a saber cómo entrar la pirotecnia? ¿Acaso no sos policía? Metela en un móvil. Entrá y justo abajo del tablero electrónico te van a estar esperando. Ahí le das todo y te vas”.
“Rengo” Aguilera: aprietes, mundiales y el inicio de una guerra narco
A veces, como en las películas, una investigación puede derivar hacia personajes, hechos y consecuencias que nadie imagina. En el cine, el efecto es magnífico; en la realidad, puede terminar en un escándalo. Y esto es lo pasó en 2006, cuando Daniel “El Rengo” Aguilera, líder de la hinchada de Godoy Cruz, fue detenido durante un mes por extorsionar a dirigentes.
“Poné más micros o se pudre todo”, decía una bandera tombina cuando arrancaba el Apertura 2006. Una fecha después, en agosto, los barras tombinos se enfrentaron a la Policía en el Malvinas Argentinas, suspendiéndose el partido contra Arsenal. Se había podrido todo, como decía la bandera.
Entonces comenzó una investigación para saber la relación entre barras y dirigentes. Se “pinchó” el teléfono de Aguilera y las charlas resultaron explosivas: el fallecido Omar Pérez Botti -peronista que comandaba el Comité de Seguridad Deportiva durante el gobierno de Julio Cobos- tuvo que renunciar: era el enlace entre Aguilera y la Policía. Además aparecieron facturas oficiales que habían solventado el transporte de los hinchas. Así, el “apriete” a dirigentes derivó en una “supuesta connivencia entre barras, dirigentes y funcionarios municipales y provinciales”.
Aguilera estuvo detenido sólo un mes. Luego fue liberado por “dudas en la participación de hecho”. Y el fracaso de la investigación judicial se debió a “la marcada reticencia de funcionarios y dirigentes” que atentó contra el descubrimiento de la verdad”. Todo quedó en nada. Fue la primera y última vez que se lo investigó a Aguilera por delitos relacionados con el fútbol.
“El único que fue preso fui yo”, le dijo entonces a Los Andes, declarándose líder tombino: “Mi función es controlar a un grupo de hinchas que, sin contención, harían cualquier cosa. Me dan entradas y dinero a cambio que esté todo bajo control”.
Mundiales: a Sudáfrica no, a Brasil, sí
Durante la época en que Godoy Cruz estuvo en la B, “El Rengo” tejió amistad con gente de Lanús, Chacarita y San Martín de Tucumán. Salvo el pequeño “traspié” en 2008 –cuando fue emboscado por hinchas de San Martín, en Tucumán, y fue salvado milagrosamente por unos policías que lo subieron a un móvil– nada impidió que se afianzara como un líder más entre los barras de los equipos de Primera A, formando parte de Hinchadas Unidas Argentinas, que lo llevaría hasta el Mundial de Sudáfrica en 2010.
La aventura africana de Aguilera fue un fiasco: tomó un vuelo Rosario- Brasil-Angola- Johannesburgo pero ahí se le “terminó la nafta”: fue detenido y deportado.
Pero el tombino tuvo revancha: con su inseparable muleta, la camiseta Godoy Cruz y lentes oscuros, llegó a Brasilia para ver cómo Gonzalo Higuaín le hacía un gol a Bélgica que ponía a Argentina en semifinales de Brasil 2014.
Desde cuándo está preso el Rengo Aguilera
Daniel “El Rengo” Aguilera fue condenado el 29 de julio de 2020 por la Justicia Federal como responsable de liderar una banda dedicada a la venta de estupefacientes, que coordinaba incluso desde su celda en el penal de Boulogne Sur Mer. Recibió una pena de 12 años de cárcel.
recientemente declaró en la causa en la que se investiga al juez federal Walter Bento por presuntas coimas a cambio de beneficios procesales para detenidos.
El Rengo preso, asume Diego Aguilera, el de los mil apodos: asesino, el uno, el jefe…
El pasado 6 de septiembre La Justicia Federal suspendió el juicio por narcotráfico que debía enfrentar Diego Aguilera (48), hermano de Daniel “Rengo” Aguilera, ex líder de la hinchada de Godoy Cruz.
El Tribunal Federal 2 había fijado fecha, el 28 de agosto pasado, para el debate contra Diego Aguilera por ser el presunto líder de una organización distribución y comercialización de estupefacientes.
Se trata de una causa en el cual ya fueron condenados 13 integrantes y absueltas seis personas en septiembre de 2022, momento en que Aguilera se encontraba prófugo de la Justicia.
Durante la investigación liderada por el fiscal federal Fernando Alcaraz y el juez federal Marcelo Garnica se realizaron, entre el 5 y el 9 de abril de 2020, 37 allanamientos y se logró el secuestro de más de 12 kilos de cocaína, 23 armas de fuego y más de mil municiones.
El requerimiento de elevación a juicio sostiene que “se estableció la existencia de una organización delictiva, liderada por Diego Ramón Aguilera Maldonado -nombrado en la causa como “Negro”, “El Uno”, “El jefe” o “Diego”-, dedicada a la obtención, ocultamiento, distribución y comercialización de estupefacientes, tanto en grandes cantidades como al menudeo, en la zona del Gran Mendoza, como así también en el Valle de Uco y en el Sur de la provincia de Mendoza, y que estos hechos habrían tenido lugar desde el inicio de la investigación que discurre en estos autos (a mediados de marzo del 2019) hasta el día 5 de junio del 2020″.
Previo a la captura del “asesino” Aguilera, el 1 de septiembre de 2022, El Tribunal Oral Federal N° 2 condenó a 13 integrantes de Clan Aguilera. Ayer los jueces Pablo Salinas, Roberto Naciff y Héctor Cortés condenaron 12 persona que fueron juzgadas por narcotráfico y tenencias de armas. Una de las penas más alta -7 años de cárcel, tal como lo solicitó la fiscal María Gloria André- fue para Enzo Aguilera Giménez, hijo de Diego y “el número 2″ de la organización, según los investigadores, se solicitó 7 años de cárcel.
Entre los absueltos quedó fuera de la sentencia otro de los hermanos Aguilera, Walter(35), quien falleció en le transcurso del debate: el 12 de julio pasado en la guardia del hospital Central, luego de haber ingresado como código rojo desde la cárcel federal ubicada en Cacheuta por una aparente sobredosis.
Quién comanda la hinchada de Godoy Cruz
El mundo de violencia de los Aguilera terminó en generar una especie de guerra interna que enfrenta a los dos ex “patrones” del clan. Daniel y Diego. Con ambos presos, Carla Aguilera, hermana de los detenidos, es uno de los nombres que aparecen como la “pata Aguilera” dentro de la barra.
Pero las internas de la barra están en su máxima tensión: problemas de liderazgo y negocios encontrados han provocado que las tribunas de Godoy Cruz dejen de ser un lugar “seguro” para el hincha genuino.
Incidentes organizados por las barras han provocado inconvenientes para el club mas representativo de la provincia.
En la fecha 3 ante San Lorenzo se registraron serios incidentes en la popular sur del Malvinas. Esto se sumo a enfrentamiento con la policía y rotura casi total de los baños del estadio. Luego en la fecha 13, ante Sarmiento, regresó la violencia.
Carla fue detenida ya que se la vinculó como promotora de los disturbios, aunque luego fue liberada.
“La Banda del Expreso”, nombre de la barra del Tomba, emitió un insólito comunicado previo al partido de River, en julio pasado, donde le aseguraban al hincha la “paz en las tribunas”, tanto para el fanático de Godoy Cruz como para los “neutrales” que pudieron asistir a ese partido.
Lo cierto es que las internas en la barra tombina siguen en medio de una tensa calma.