Los múltiples incidentes del fin de semana, que incluyeron saqueos a comercios, enfrentamientos con la Policía y decenas de detenidos, dejaron una atmósfera por demás enrarecida en distintos puntos del Gran Mendoza. Y Las Heras, al ser el departamento donde se registraron la mayoría de los violentos incidentes, es también donde más se observaron este martes las consecuencias.
Luego de los desmanes del sábado por la tarde, y ante rumores de nuevos disturbios que se viralizaron en WhatsApp y en las redes sociales, durante la mañana de este mates (primer día hábil luego del fin de semana largo) comerciante de la zona de calle Independencia -mismo escenario de las caóticas escenas del fin de semana- decidieron atender al público con las persianas bajas.
Incluso, los padres de los alumnos y alumnas de una escuela ubicada en el lugar llegaron al establecimiento antes de las 11 para retirar a sus hijos. “Se rumoreaba que a eso de las 11 iba a haber nuevos saqueos, por eso vine a buscar ahora a mi hija. Casi no quedan chicos ya”, contó Cecilia y mientras se retiraba con su hija de la escuela Cruzada Libertadora (Las Heras).
TENSIÓN Y ALERTA
Luego de los saqueos, robos y desmanes del sábado en comercios de calle Independencia de Las Heras -y que tuvieron su correlato en algunos comercios de Guaymallén y Godoy Cruz durante el resto del fin de semana-, las cadenas de WhatsApp y los rumores no dejaron de sucederse.
Supuestas convocatorias a seguir saqueando no hicieron -ni hacen- más que agitar aún más el avispero. No solo entre los comerciantes de la zona, sino también dentro de la Policía de Mendoza. De hecho, pasadas las 11 de hoy, martes, cada dos esquinas -siempre sobre calle Independencia- había consigna policial.
En sus móviles (autos y camionetas) o apostados en las esquinas, armas en mano, estaban atentos ante cualquier movimiento atípico. “Dicen que a las 11 iba a haber nuevos saqueos, que la gente iba a concentrarse en el campo histórico El Plumerillo y de ahí iban a salir. Por eso estamos atendiendo con la persiana baja”, contó a Los Andes uno de los comerciantes de la zona, minutos después de las 11.
Y aunque el movimiento era relativamente normal en la zona, la tensión, el temor y el estado de alerta estaban latentes.
Según resumieron los comerciantes de la zona -y algunos efectivos policiales-, cerca de las 2 de la mañana de hoy comenzaron a circular entre vecinos y comerciantes versiones de que a las 11 de hoy iban a registrarse nuevos saqueos y ataques grupales en negocios de esa zona, misma arteria donde se registraron los robos en banda del sábado.
Ante esta advertencia, muchos locales que habían abierto con normalidad decidieron bajar las persianas a la mitad cerca de la hora señalada y siguieron atendiendo con la gente esperando afuera.
Más allá de la advertencia y del temor instalado, hasta pasado el mediodía de hoy no se habían registrado movimientos inusuales o sosprechosos en la zona. Tampoco en las inmediaciones del mayorista Tadicor, ubicado a la vera del Acceso Norte y donde esas mismas versiones de saqueos organizados referían que habría ataques en la mañana.
LA CARNICERÍA ARRASADA NO VOLVIÓ A ABRIR
Una de las caras más tristes y duras de los ataques organizados del sábado pasado es la que dejó una histórica carnicería de calle Independencia. En el lugar, los atacantes arrasaron con todo lo que encontraron a su paso.
De esta manera, no solo se llevaron mercadería y dinero, sino que también destrozaron equipamiento. Así las cosas, decidieron no abrir las puertas durante este martes.
Otra sucursal del mismo comerciante, ubicado una cuadra al oeste de la que fue vandalizada, tenía atención al público. No obstante, hacían pasar de a dos a los compradores y tenían a efectivos policiales en la puerta.
De hecho, algunos comerciantes llegaron a recurrir a seguridad privada.