El caso de la bebé hallada sin vida el lunes en una planta recicladora de Alto Salvador, en San Martín, tiene novedades para los pesquisas que buscan esclarecer quiénes son los autores del crimen. Estiman que la criatura nació viva y fue asfixiada en el mismo instante en que salió del vientre materno. Además, los primeros incididos datan de que habría llegado en un camión recolector que venía de Palmira.
Hallazgo escalofriante
Los recolectores que trabajan en la planta recicladora, ubicada en calle Barrera y Oratorio, estaban clasificando la basura el lunes alrededor de las 14, cuando de pronto, como sacado de la más retorcida novela de terror, uno de los obreros encontró una beba sin vida.
Los trabajadores quedaron estupefactos frente al cuerpito yaciendo entre la basura y llamaron al 911. Un móvil de la Policía llegó al lugar y constató la misma escena espeluznante que habían descrito los hombres en el llamado: dentro de una bolsa negra, tipo de consorcio, había una bebé recién nacida envuelta en una sábana, un buzo y con una bolsa en la cabeza. Tenía el cordón umbilical y entre los envoltorios estaba la placenta.
Nació viva
Minutos más tarde llegó al lugar Policía Científica y personal del Ministerio Público Fiscal para inspeccionar la escena y darle inicio a la investigación, que quedó en manos del fiscal de San Martín-La Colonia, Gustavo Jadur.
Luego, los restos de la bebé fueron llevados a la morgue judicial, donde en una primera revisión los forenses explicaron que se trataba de una bebé con gestación a término, que habría nacido viva y asfixiada en el mismo instante en que salió del canal de parto. Sin embargo, esas primeras pruebas deberán ser corroboradas con los análisis histopatológicos del laboratorio del Cuerpo Médico Forense, cuyos resultados conllevan tiempo.
Otro de los aspectos que se pudo obtener en una primera revisión fue que la criatura llevaba entre doce y 24 horas fallecida cuando la encontraron los obreros. Por lo que se estima que la hora de muerte habría sido entre las 4 y las 12 del domingo, según informaron fuentes judiciales a Los Andes.
Pruebas claves
Además del pequeño cadáver, tantos las sábanas, como el buzo y la placenta serán pruebas claves para la investigación porque en todas ellas se hallaron manchas hemáticas que podrían ayudar a dar con la identidad de los progenitores. Así como se espera encontrar posibles huellas.
Con esos rastros genéticos recogidos se llevará adelante una prueba de ADN con la información existente en el Registro Provincial de Huellas Genéticas, por lo que en el caso de haber una “match”, es decir, una coincidencia, los investigadores podrían obtener el perfil de quienes buscan.
Entre otras de las pruebas que suman a la causa, que está siendo investigada como homicidio agravado, está el recorrido que hizo el camión recolector durante el fin de semana. Entre los primeros datos se estima que el rodado habría salido desde Palmira, distrito en el que recogen los residuos vecinales a partir de las 21 hasta la madrugada, tiempo que coincide con la hora del deceso.