Los peritos que intervinieron en el análisis diversos elementos de prueba en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa hallaron sangre de la víctima en menos siete prendas de vestir secuestradas a los ocho acusados por el crimen cometido en Villa Gesell el 18 de enero de 2020, entre ellas, dos zapatillas de Máximo Thomsen y una camisa de Matías Benicelli.
En ese sentido, las mayores precisiones fueron aportadas por un informe que presentó ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Dolores, César Guida, forense genetista del Ministerio Público que tuvo a su cargo las pericias durante la instrucción de la causa.
Según este informe, tanto el calzado de Thomsen (23) como la camisa de Benicelli (23) y otras cuatro prendas de algunos de los rugbiers tenían manchas hemáticas que coincidían con las muestras correspondientes al joven asesinado.
En ese sentido, aseguró que ambas zapatillas marca Cyclone talle 40/41 usadas por Thomsen la madrugada del crimen tenían en total tres rastros de sangre de la víctima.
Se trata del mismo calzado cuya impronta quedó marcada en el maxilar inferior de Fernando, tal como confirmó una pericia scopométrica.
Según informó Télam, Guida también detalló que rastros de material genético obtenidos a través de un hisopado realizado en el dedo meñique de la mano izquierda de Báez Sosa mostraron “coincidencia con el perfil de la muestra” perteneciente a Cinalli (21).
Y agregó que, en el análisis de más de 150 evidencias tomadas de prendas, vasos, tazas, colillas de cigarrillos, cinturones, gasas e hisopados, entre otras; se determinó que también había sangre de Fernando en una camisa floreada, un pantalón de gabardina gris, dos jeans y una zapatilla derecha Nike perteneciente a los acusados.
“Al día de hoy no sé a quién pertenece cada prenda y quien la usó”, señaló el forense ante los jueces María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lazzari. Del informe de 47 páginas se desprende que la camisa floreada, que tenía tres manchas de sangre, tenía rastros compatibles con el perfil genético de Benicelli.
Al término de la audiencia, el abogado de la familia de Báez Sosa, Fernando Burlando, señaló que, en base a distintos elementos, la querella pudo establecer que el pantalón de gabardina gris mencionado -con dos manchas- era de Luciano Pertossi (21), uno de los jeans pertenecía a Ciro Pertossi (22), y el otro y la zapatilla eran de Benicelli.
Además, el informe del perito confirmó la correspondencia genética entre la sangre de Fernando y rastros obtenidos en el lugar del ataque, frente al boliche “Le Brique”.