El crimen del joven futbolista Lucas González conmovió a todo el país y ya son varios los policías detenidos por estar involucrados en el caso. Esta vez se dió con cinco efectivos que fueron detenidos durante el sábado.
Anteriormente se había detenido a tres policías acusados de “homicidio doblemente agravado por haber sido cometido por miembros de las fuerzas policiales abusando de sus funciones y con alevosía; falsedad ideológica y la privación ilegal de la libertad”. Estos se encuentran en el Complejo Penitenciario Federal 2 de Marcos Paz.
En esta jornada fueron detenidos cinco oficiales más que fueron acusados por encubrimiento de la balacera que terminó con la muerte del joven deportista. Estos fueron trasladados a la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal Argentina y pasarán la noche hasta que sean indagados en tribunales.
Las detenciones fueron pedidas por el fiscal Leonel Gómez Barbella y Andrés Heim, titular de la Procuraduría de Violencia Institucional. Entre los cinco acusados se encuentra el jefe de la Brigada y el jefe de la comisaría Vecinal 4D.
Los fiscales a cargo del caso consideran que estos efectivos son sospechosos de los delitos de “encubrimiento agravado, privaciones de la libertad agravadas y falsedades ideológicas”, además están convencidos que uno de ellos fue quien plantó el arma a las victimas. Específicamente se trata del jefe Juan Romero, el subcomisario Inca, el comisario Fabián Di Santos, la oficial Fariña y el principal Cuevas.
Fuentes cercanas al caso indicaron que también se capturó a Miño pero aún no hay detalles oficiales al respecto.