Un particular giro dio este lunes la investigación por el crimen de Rodrigo “El Chuli” Ortiz (40), acribillado a balazos en la madrugada del sábado pasado en el barrio Sargento Cabral de Las Heras. Cayó como sospechoso un hombre que había sido herido durante los hechos y que las autoridades en principio lo tenían como víctima.
Se trata de Juan Abel Rivas (37), quien en la madrugada de esa jornada había llegado al hospital Lagomaggiore con un disparo en la pierna izquierda, como consecuencia de un proyectil que rebotó en el piso e impactó en uno de sus miembros inferiores. Lo asistieron en el nosocomio, a donde llegó en un Ford Fiesta Kinetic que manejaba su hijo de 15 años, y rápidamente le dieron el alta.
Este hombre fue lesionado en el mismo episodio en el que Ortiz fue asesinado tras recibir 13 tiros, sobre calle Padre Llorens. La víctima fatal estaba en un cumpleaños cuando se produjo un tumulto entre varios menores de edad y él intentó separar.
Estando en la calle y en medio de la pelea, lo ejecutaron con una pistola 9 milímetros. En ese ataque terminó baleado Rivas, de quien en las primeras horas no se sospechaba. Incluso se creía que había ido hasta el lugar a buscar a su hijo y que la “ligó” de arriba.
Sin embargo, el avance investigativo y los testigos lo ponen como acusado y este lunes fue detenido tras un par de allanamientos en el barrio San Martín, de Ciudad. En dichas medidas, se secuestró el vehículo en el que su hijo lo trasladó al hospital.
El hombre quedó a disposición del fiscal Gustavo Pirrello, que en la mira también tiene a un menor de edad por su posible intervención en el homicidio.
