Deportaron a un ciudadano de nacionalidad chilena, tras haber perpetrado un robo recientemente en una vivienda ubicada en el barrio porteño de Saavedra.
A menos de dos semanas de aquel hecho la Dirección Nacional de Migraciones resolvió la expulsión del malviviente y la prohibición del reingreso al territorio argentino.
El 13 de septiembre, Aron Gustavo Parrapino, de 19 años, fue detenido por personal de la Policía de la Ciudad en Miller y Correa, luego de que un vecino denunciara que había entrado a su casa, en la calle Besares al 4.500.
Cuando los oficiales de la Comisaría Vecinal 12 A de la Policía de la Ciudad lo requisaron ante testigos, se le secuestraron doce tarjetas de débito a nombre de la madre del damnificado, 30 pesos uruguayos, 13.100 pesos argentinos y hasta seis australes.
Por su parte, el denunciante reconoció los elementos secuestrados como de su propiedad y aseguró que su madre había perdido las llaves de la vivienda ese día, informó la Agencia Noticias Argentinas.
Durante la inspección del domicilio no se evidenciaron daños pero sí se encontraba revuelto, por lo cual el delincuente habría ingresado a la casa sin violentar el acceso.
El caso quedó a disposición de la Fiscalía de Saavedra-Núñez, a cargo de José María Campagnoli, Secretaría del Dr. Carlos Quinto Frías, quien ordenó la detención y el secuestro de los elementos.
Tras esa disposición con la diligencia de la División Enlace con el Poder Judicial y Servicio Penitenciario de la Policía de la Ciudad, el imputado fue llevado hasta el Aeroparque Metropolitano Jorge Newbery, donde este miércoles abordó un vuelo hacia Santiago de Chile.
Por su parte, el jefe de gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, sostuvo en la red social X que “No vamos a tolerar que vengan extranjeros a delinquir: extranjero que delinque es expulsado, vuelve a su país de manera rápida, no tenemos por qué hacernos cargo de cuidarlos, de tenerlos detenidos. Vinimos a ordenar la Ciudad y a dar seguridad y sostenemos nuestras convicciones para luchar contra los delincuentes”.
En tanto, el ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolff, manifestó: “Visitar la Ciudad, sí. Trabajar en la Ciudad, sí. Venir a delinquir a la Ciudad, no. Al extranjero que delinque, lo queremos afuera. Vamos a seguir trabajando en conjunto con la justicia y con Migraciones para acelerar los procesos de expulsión de todos aquellos que vengan a cometer delitos y que no puedan ingresar nunca más al país”.