La Policía de Investigaciones de Chile terminó de desarticular a una organización delictiva dedicaba al robo de empresas y casas particulares que lideraba un argentino y se hacía llamar la “Banda de los Países”, ya que sus integrantes se denominaban con nombres de países, emulando a la serie española “La Casa de Papel”.
El viernes pasado, detectives de la Brigada Investigadora de Robos (BIRO) de Rancagua detuvioeron a “Bélgica”, un hombre de 24 años que es el noveno y último integrante de la peligrosa banda, según publicó el diario el periódico digital Andes Online de Chile.
Según distintas publicaciones chilenas, estos delincuentes comenzaron a actuar hace unos tres meses, luego de que se decretara la emergencia sanitaria por la pandemia de Covid-19, en el vecino país. La banda, se dedicaba a saquear –a veces violentamente- viviendas y empresas de la región de O’Higgins, logrando obtener unos 100 millones de pesos, entre dinero y objetos de los que se adueñaron en cuatro comunas de las provincias de Cachapoal y Colchagua.
La banda ingresaba a las viviendas cuando estaban los dueños de casa y armados actuaban de forma agresiva, golpeando y amenazando a sus víctimas para llevarse luego artículos tecnológicos, joyas, dinero y, en algunos casos, vehículos.
Líder argentino
El primer de julio pasado la Policía de Investigaciones chilena detuvo en la comuna de San Fernando a dos integrantes de la banda, uno de ellos de nacionalidad argentina que fue considerado como “uno de los autores intelectuales de los atracos y mantendría su situación migratoria irregular, además de contar con antecedentes por delitos similares”.
Según los medios chilenos la “Banda de los Países” comenzó actuar el 18 de abril y llegó a cometer unos 20 robos durante abril, mayo y principios de junio en las comunas de Rancagua, San Fernando, Nancagua, Coinco y San Francisco de Mostazal.
Los delincuentes emulaban la serie española “La Casa de Papel”, cubriendo sus rostros y usando como apodos, diferentes países, haciéndose fotos y videos de los atracos, “siendo liderados por un argentino que había cumplido condenas en el vecino país”.
Según Andes Online, “para cometer sus delitos empleaban inusitada violencia, provocando daños en los inmuebles, intimidando a sus víctimas con pistolas, revólveres, escopetas, cuchillos y hasta con la herramienta llamada combo, maniatando a algunas e incluso con amenazas de muerte o de violar a quienes componían sus familias”.